El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha dicho que Irán “probablemente” podría haber fabricado un arma nuclear hace diez años si el Estado judío no hubiera tomado medidas. Añadió que las ambiciones nucleares de Teherán siguen siendo una amenaza.
Los comentarios se producen apenas unos días después de que el New York Times informara de que científicos iraníes están trabajando en un método más rápido para desarrollar armas nucleares.
Según fuentes de inteligencia estadounidenses, un equipo encubierto de científicos con base en Teherán ha recibido el encargo de encontrar una nueva forma de producir una bomba atómica. El informe también indica que la nueva información de inteligencia fue uno de los temas tratados durante la visita de Estado de Netanyahu a Estados Unidos esta semana.
“Irán probablemente habría estado allí hace diez años si no hubiéramos tomado diversas medidas para frenarlo. Lo hicimos”, dijo el primer ministro israelí a Fox News en Washington el jueves. Agregó, sin embargo, que los esfuerzos de Teherán no fueron detenidos “por completo”.
Netanyahu subrayó la postura compartida del presidente estadounidense Donald Trump sobre el tema, señalando: “El presidente dijo algo muy simple, que yo también dije. No se debe permitir que Irán tenga armas nucleares”.
Occidente e Israel consideran desde hace tiempo que las actividades de enriquecimiento de uranio de Irán constituyen un intento secreto de desarrollar armas nucleares. Teherán ha negado las acusaciones e insiste en que sus actividades nucleares tienen fines exclusivamente pacíficos. El país ha sido objeto de numerosas sanciones internacionales durante décadas por su programa de desarrollo nuclear.
En 2015, Irán alcanzó un acuerdo nuclear con las potencias mundiales, conocido como Plan de Acción Integral Conjunto, que limitó el programa nuclear de Teherán a cambio de un alivio parcial de las sanciones.
Sin embargo, en 2018, durante el primer mandato de Trump, Estados Unidos se retiró unilateralmente del acuerdo. Desde entonces, Irán ha aumentado significativamente su capacidad de enriquecimiento de uranio y los esfuerzos por reactivarlo no han tenido éxito, aunque Teherán ha afirmado que está dispuesto a entablar conversaciones si se le trata con “respeto”.
En diciembre, Rafael Grossi, director del Organismo Internacional de Energía Atómica, declaró que Irán estaba acelerando “drásticamente” su enriquecimiento de uranio hasta alcanzar una pureza del 60%, y calificó el hecho de “muy preocupante”.