La Unión Demócrata Cristiana Alemana (CDU) y la oposición Unión Social Cristiana (CSU) exigen controles a largo plazo en las fronteras alemanas y la prohibición de entrada a todos los extranjeros que no tengan permiso de residencia en el país.
El bloque presentará en el Bundestag una resolución con propuestas sobre política migratoria.
El periódico Bild informa que la propuesta incluye una cláusula para declarar el estado de emergencia en Alemania por la afluencia de inmigrantes ilegales, permitiendo a las autoridades introducir controles fronterizos completos y permitir que se eluda la legislación de la Unión Europea en las fronteras alemanas.
El proyecto de resolución se refiere a los “nuevos niveles de violencia” que enfrenta el país, incluido el reciente ataque de un hombre afgano contra un grupo de niños de un jardín de infancia en la ciudad bávara de Aschaffenburg.
“El Bundestag alemán se niega a reconocer que ésta es la nueva norma en Alemania”, se lee en el documento.
“Si las medidas europeas no funcionan, es deber de Alemania, y por tanto de su gobierno, aplicar prioritariamente el derecho nacional tal y como prevén las normas de emergencia europeas”, afirma.
Esta semana se reavivó en Alemania un debate público sobre las deportaciones de inmigrantes después de que el solicitante de asilo rechazado de Afganistán apuñalara hasta la muerte a dos personas, incluido un niño, e hiriera a otras tres en Aschaffenburg el miércoles.