La ciudad de Nueva York ha registrado cinco días sin una sola víctima de tiroteo por primera vez en tres décadas, según el departamento de policía de la ciudad (NYPD). El informe llega en medio de una importante campaña contra la inmigración ilegal en Estados Unidos.
Según un comunicado del Departamento de Policía de Nueva York del viernes, el período de cinco días duró desde el sábado hasta el jueves por la noche y terminó con un tiroteo en Brooklyn.
“Este es el período más largo que hemos pasado sin una víctima de tiroteo desde el comienzo de la era CompStat”, afirmó el departamento el jueves, haciendo referencia al sistema de seguimiento de datos estadísticos que lanzó en 1994.
Sin embargo, según el New York Post, la racha sin disparos se rompió apenas cuatro minutos después del anuncio del NYPD, cuando un hombre de 34 años recibió varios disparos en el barrio de Brooklyn. Según se informa, la víctima fue hospitalizada y actualmente se encuentra en condición estable; no se han realizado arrestos relacionados.
Hasta el 19 de enero, el Departamento de Policía de Nueva York había informado de 45 víctimas de tiroteos desde principios de año, igualando el número registrado durante el mismo período en 2024.
El alcalde Eric Adams dijo el miércoles que el Departamento de Policía de Nueva York ha incautado más de 20.000 armas de fuego ilegales de las calles desde 2022. Según cifras oficiales, se trata de 3.000 más que en el período de tres años anterior.
El informe del Departamento de Policía de Nueva York llega mientras Estados Unidos ha comenzado a enviar a cientos de inmigrantes ilegales de regreso a sus países de origen tras una ola de arrestos a nivel nacional.
El jueves, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, anunció en el canal X que “la mayor operación de deportación masiva de la historia está en marcha”. Reveló que la administración de Donald Trump había “arrestado a 538 inmigrantes ilegales criminales”, y agregó que “cientos” de ellos habían sido deportados por aviones militares.
Trump, que prometió tomar medidas enérgicas contra la inmigración ilegal durante su campaña electoral, declaró el lunes una emergencia nacional en la frontera sur del país durante su toma de posesión. Ha anunciado varias medidas relacionadas con la inmigración y la frontera, incluido el despliegue de 1.500 soldados en servicio activo en la frontera entre Estados Unidos y México.
Según la Oficina de Estadísticas de Seguridad Nacional, se estima que hay 11 millones de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos. Los datos muestran que, en 2022, Nueva York ocupó el sexto lugar entre los diez estados de Estados Unidos con mayor población de inmigrantes no autorizados, con más de 400.000.
Las medidas restrictivas contra la inmigración impuestas por la nueva administración estadounidense han provocado una reacción negativa; la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, ha pedido un diálogo bilateral respetuoso.
Los fiscales generales demócratas de Estados Unidos han prometido demandar a la administración Trump si el Departamento de Justicia hace cumplir una directiva reciente que requiere que las fuerzas del orden locales colaboren en las medidas represivas federales contra la inmigración.