El Gobierno de Javier Milei continúa con los destrozos en el país: 1.400 trabajadores fueron despedidos en el Ministerio de Salud y hospitales públicos de la nación.
A través de un comunicado el Gobierno de Argentina avaló el despido de los 1.400 trabajadores del Ministerio de Salud y hospitales públicos de todo el país por un “proceso de reestructuración” en el sector sanitario.
En este sentido, el ministerio que tiene como su máxima autoridad a Mario Lugones refirió que la medida responde a una “optimización de los recursos humanos”, mientras alega la supuesta “identificación de irregularidades” en la contratación de personal durante la gestión anterior.
Entre los espacios donde no se renovarán los contratos se encuentran el Ministerio de Salud, el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (PAMI), centros de salud como el Hospital Español, Hospital Bonaparte, Hospital Sommer, Hospital Posadas, Hospital René Favaloro, el Instituto Nacional del Cáncer, la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas (Sedronar), entre otras instituciones.
La decisión se suma al recorte del 30 por ciento de “cargos políticos” realizado durante los primeros días del año.
Entre tanto, el Hospital Sommer, quien se especializa en rehabilitación y cuidados paliativos de pacientes adultos y en la prevención de la enfermedad de Hansen (lepra), comenzó el año con 150 despidos y se esperan más para los meses de febrero y marzo de acuerdo a medios locales.
“Ante los anuncios de despidos del Gobierno Nacional informamos a la comunidad que lxs trabajadores del Hospital Bonaparte nos encontramos en alerta permanente”, difundió el personal del hospital de salud.
Por otra parte, los trabajadores de la Secretaría de Derechos Humanos y del Centro Cultural Haroldo Conti, que funciona en el ámbito del predio de la Ex Escuela de Mecánica de la Armada (Esma), lanzaron una campaña internacional para alertar sobre los despidos y recortes presupuestarios dispuestos por el Gobierno en los espacios de la Memoria.
De acuerdo a la plataforma Tiempo argentino, “se trata de una acción que concitó la adhesión de organizaciones políticas, sociales, sindicales y de derechos humanos de varios países que le solicitan al secretario de Derechos Humanos,Alberto Baños, y al ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, “preocupación” por lo que se considera como “una arremetida” contra políticas que el país siguió durante dos décadas con el propósito de reparar y sancionar los delitos de lesa humanidad que se cometieron en los años ’70 y que han sido un ejemplo para el mundo”.