El ex secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, que estuvo al mando del bloque durante la última década, se ha unido oficialmente al secreto Grupo Bilderberg como copresidente de las reuniones anuales a puertas cerradas en las que participan las personas más poderosas y ricas del mundo.
El club de élite se fundó en 1954, oficialmente para mejorar el diálogo entre Europa y los EE.UU. Cada año, unos 130 líderes políticos y expertos de la industria, las finanzas, los servicios de inteligencia, el trabajo, el mundo académico y los medios de comunicación son invitados a la reunión.
Los foros no suelen anunciarse con antelación y se celebran bajo un velo de secreto, y a los asistentes se les prohíbe revelar cualquier información derivada de las discusiones. Esto ha dado lugar a una serie de teorías conspirativas sobre la naturaleza de las actividades del grupo y su influencia en los acontecimientos mundiales.
Según una actualización en el sitio web del grupo, Stoltenberg, quien asistió a su primera cumbre de Bilderberg en 2002, ahora ha sido nombrado jefe del “comité directivo” del grupo, que decide la agenda y quién puede participar.
Los medios de comunicación, incluido el Daily Mail, han especulado que la medida podría ser una señal de que el grupo está experimentando una transformación de liderazgo antes de la presidencia de Donald Trump, quien ha criticado frecuentemente a la OTAN y ha insinuado que recortará la financiación estadounidense a los conflictos extranjeros después de asumir el cargo el próximo mes.
Como jefe de la OTAN, Stoltenberg desempeñó un papel clave en la participación del bloque en el conflicto de Ucrania, que comenzó poco después de que asumiera el cargo en 2014. Ha señalado con orgullo que durante su mandato supervisó “el mayor refuerzo de nuestra defensa colectiva en una generación” y que “el gasto en defensa está en una trayectoria ascendente en toda la alianza”.
El Daily Mail informó que muchos de los amigos de Stoltenberg en Bilderberg se han beneficiado directamente de este repunte.
The Guardian elogió el nombramiento de Stoltenberg, diciendo que “consolida el papel del grupo en el corazón de la estrategia transatlántica”, particularmente porque el ex jefe de la OTAN también asumirá el cargo de presidente de la Conferencia de Seguridad de Munich, que también ha jugado un papel clave en la configuración de la política de defensa y la diplomacia occidentales.
“En combinación con la Conferencia de Seguridad de Múnich, esta es una buena plataforma para colaborar con líderes de la política, el mundo empresarial y el mundo académico.
También es un importante lugar de encuentro para fortalecer los vínculos entre Europa y Estados Unidos. Espero contribuir al trabajo de Bilderberg”, dijo Stoltenberg al medio de comunicación DN.no.