La dirección y los sindicatos de Volkswagen no han llegado a un acuerdo sobre la propuesta de la empresa alemana de suprimir puestos de trabajo y cerrar plantas. El lunes los trabajadores se declararon en huelga.
La cuarta ronda de negociaciones colectivas de Volkswagen AG celebrada el lunes no logró encontrar una solución entre la dirección y los sindicatos.
Miles de empleados dejaron de trabajar durante cuatro horas en nueve plantas alemanas mientras jefes y sindicatos iniciaban una nueva ronda de negociaciones sobre recortes salariales y cierres de plantas.
Las renovadas negociaciones tenían como objetivo poner fin a un enfrentamiento entre el fabricante de automóviles alemán y sus empleados después de que el gigante automovilístico rechazara la última propuesta presentada por los sindicatos, que incluía una reducción de las horas de trabajo, la reducción de los pagos de dividendos y el recorte de algunas bonificaciones, lo que en conjunto significó un ahorro de 1.500 millones de euros.
Tras las conversaciones del lunes, el negociador jefe de la compañía, Arne Meiswinkel, dijo: “Todavía estamos muy lejos de una solución viable”, pero añadió que las discusiones fueron “constructivas”.
En un correo electrónico enviado a Euronews, la empresa afirmó: “Para alcanzar nuestro objetivo, necesitamos una reducción de costes que pueda implementarse a corto plazo y que tenga un efecto duradero. Esta es la única forma de asegurar nuestras futuras inversiones”.
Volkswagen, que lucha contra la escasa demanda en Europa y la competencia en China, quiere ahorrar 10.000 millones de euros. Para ello, está considerando cerrar plantas en Alemania, lo que supondrá una reducción sin precedentes de miles de puestos de trabajo y de los salarios, y argumenta que debe reducir los costes en Alemania para preservar su competitividad.
La dirección de Volkswagen AG pretende reducir el exceso de capacidad de la empresa y disminuir los costes de fábrica, incluidos los elevados costes laborales.
Después de las negociaciones, el sindicato dominante de trabajadores del metal, IG Metall, dijo en su página web: “La alta dirección de la empresa había anunciado que quería recortar los salarios, cerrar plantas y despedir a miles de empleados”.
Los sindicatos dudan de las medidas de reducción de costes
Sin embargo, los sindicatos dudan de que estos recortes de costes sean los únicos que puedan ayudar. Tras las negociaciones del lunes, el negociador de IG Metall, Thorsten Gröger, declaró: “Hay que encontrar una solución sin cierres de plantas ni despidos. (…) La carga de apoyar las futuras inversiones no debe trasladarse unilateralmente a los empleados. La junta directiva y los accionistas también tienen el deber de hacer su contribución justa”.
El canciller alemán, Olaf Scholz, también se sumó al debate y pidió al fabricante de automóviles que no cierre fábricas, según informó el grupo de medios Funke. Scholz reconoció que corresponde a la empresa y a sus representantes de personal discutir el asunto.
Las negociaciones estuvieron acompañadas el lunes de huelgas de advertencia en nueve plantas de Volkswagen. Según los sindicatos, unos 68.000 empleados pararon el trabajo a primera hora de la tarde. La semana pasada, 100.000 empleados de todo el país pararon el trabajo durante dos horas para participar en una llamada “huelga de advertencia”.
El lunes, 38.000 empleados se manifestaron frente a la sede central del fabricante de automóviles en Wolfsburg contra los planes de la dirección de VW: cierres de plantas, despidos masivos y recortes salariales, según IG Metall.
Se prevén más conversaciones y más huelgas
Las negociaciones se reanudarán la semana que viene. IG Metall y Volkswagen han acordado continuar las negociaciones del convenio colectivo los días 16 y 17 de diciembre.
Según el negociador jefe de Volkswagen, las discusiones se intensificarán “a nivel operativo sobre la ocupación de las plantas y las capacidades en Alemania”.
Meiswinkel añade: “También en este caso las posiciones están muy alejadas. No podemos descartar el cierre de plantas”.
Los sindicatos describieron las negociaciones como “condicionales a dar forma a las cosas”, pero añadieron que todavía queda “un largo camino por recorrer antes de un posible acercamiento”.
Los sindicatos amenazan con hacer huelga en 2025 si no se llega a un acuerdo.
“Si no se llega a un acuerdo en interés de los empleados antes de Navidad, IG Metall se reserva el derecho de intensificar significativamente las medidas de huelga de aviso en 2025”, afirmó el sindicato en un comunicado.