Los partidos de oposición en Corea del Sur presentaron el miércoles una moción para destituir al presidente Yoon Suk-yeol, quien enfrenta crecientes pedidos de dimisión después de imponer una efímera ley marcial que sumió al país en un caos político.
Para destituir a Yoon se necesitaría el apoyo de dos tercios del Parlamento y el respaldo de al menos seis de los jueces del Tribunal Constitucional del país.
El presidente de la Asamblea, Woo Won-sik, tiene previsto abrir una sesión para debatir la moción, lo que podría ocurrir incluso dentro de dos días.
Los principales asesores y secretarios de Yoon ofrecieron su dimisión colectiva, y los miembros de su gabinete, incluido el ministro de Defensa, Kim Yong Hyun, también se enfrentaron a peticiones de que dimitieran. La nación se esforzaba por dar sentido a lo que parecía ser una maniobra mal pensada.
Yoon impuso abruptamente la ley marcial en el país en un discurso televisado el martes, prometiendo eliminar a las fuerzas “antiestatales”. Acusó a la oposición del país de simpatizar con Corea del Norte y dijo que la ley marcial ayudaría a “reconstruir y proteger” al país de caer en la ruina.
“Eliminaré las fuerzas antiestatales lo más rápido posible y normalizaré el país”, dijo al tiempo que pidió al pueblo que crea en él y tolere “algunos inconvenientes”.
Después de su declaración, 190 legisladores del parlamento de Corea del Sur entraron por la fuerza al edificio cerrado para rechazar el decreto, que fue levantado formalmente en las primeras horas de la mañana del miércoles, apenas seis horas después de que Yoon lo aprobara.
El partido opositor liberal Partido Democrático, que tiene mayoría en el Parlamento, calificó de ilegal la declaración de Yoon y le exigió que tome medidas para dimitir.
“Su declaración de ley marcial no era válida en un principio y constituía una grave violación de la Constitución. Fue un grave acto de rebelión y proporciona motivos perfectos para su destitución”, afirmó el partido en un comunicado.
Si Yoon es destituido, será despojado de sus poderes constitucionales hasta que el Tribunal Constitucional pueda decidir sobre su destino, y el primer ministro del país, Han Duck-soo, asumirá sus responsabilidades presidenciales.
Mientras aumentaban los pedidos de renuncia del gabinete de Yoon, Han emitió un mensaje público pidiendo paciencia y llamando a los miembros del gabinete a “cumplir con sus deberes incluso después de este momento”.
‘Estoy seriamente preocupado’
Los surcoreanos reaccionaron con conmoción a la decisión de Yoon, que supone la primera vez que se declara la ley marcial en la democracia asiática en casi 50 años.
Cuando se declara la ley marcial, se pueden emplear “medidas especiales” para restringir la libertad de prensa, la libertad de reunión y otros derechos, así como el poder de los tribunales.
Tras el anuncio de Yoon, el ejército surcoreano anunció que se suspenderían las reuniones parlamentarias y otras reuniones políticas que pudieran causar “confusión social”, según los medios locales. El ejército afirmó que cualquiera que violara el decreto podría ser arrestado sin orden judicial.
Según la constitución de Corea del Sur, el presidente puede declarar la ley marcial durante “tiempos de guerra, situaciones similares a una guerra u otros estados de emergencia nacional comparables” que requieran el uso de la fuerza militar para mantener la paz y el orden.
Es cuestionable que Corea del Sur, una democracia funcional y relativamente pacífica, se encuentre actualmente en esa situación.
En Washington, la Casa Blanca dijo que Estados Unidos estaba “seriamente preocupado” por los acontecimientos en Seúl, y un portavoz de la administración del presidente Joe Biden agregó que no fueron informados de antemano de la decisión de Yoon y que estaban en contacto con el gobierno de Corea del Sur.
Yoon, cuyo índice de aprobación cayó en los últimos meses, ha tenido dificultades para impulsar su agenda frente a un parlamento controlado por la oposición desde que asumió el cargo en 2022.
Su gobierno, en particular, se ha visto atrapado en un punto muerto con la oposición en lo que respecta al proyecto de ley de presupuesto del año próximo.
Durante su anuncio televisado, Yoon también describió a la oposición como “fuerzas desvergonzadas pro-Corea del Norte y antiestatales que están saqueando la libertad y la felicidad de nuestros ciudadanos”. No dio más detalles.