La mitad de los haitianos, cerca de 5,4 millones de personas, se encuentra hoy en una situación de hambre aguda, otro hito sombrío provocado por la violencia en el país, según un informe de Naciones Unidas.
La más reciente publicación del Índice de Clasificación Integrada (IPC, siglas en inglés) del organismo advierte que más de dos millones de personas en Haití enfrentan niveles de emergencia de hambre, o Fase cuatro de la escala establecida por ese reporte.
De acuerdo con la investigación, tres de cada cuatro desplazados internos padecen inseguridad alimentaria, mientras que seis mil haitianos obligados a abandonar sus hogares podrían encontrarse en la Fase cinco.
El organismo confirmó que esta es la primera vez desde septiembre de 2022 que se registra ese nivel de inseguridad alimentaria en la nación caribeña.
Según datos divulgados por Naciones Unidas, entre marzo y junio de 2024 los desplazamientos se duplicaron en el país a causa de la violencia en las zonas controladas por pandillas.
Casi 700 mil haitianos dejaron sus hogares como resultado de ese fenómeno, muchos de los cuales perdieron sus medios de vida y no tienen forma de alimentar a sus familias.
Más de la mitad de los nuevos desplazados escaparon de la capital, Puerto Príncipe, al sur de Haití.
A la par, casi 1,5 millones de niños permanecen sin recibir educación durante el último año escolar, y otros cientos de miles sin escolarizar se enfrentan al riesgo de ser reclutados por grupos armados.