Las fuerzas rusas han entrado en la parte oriental de Toretsk, en la región de Donetsk, confirmó el mando militar ucraniano.
El portavoz del Grupo Táctico Operacional de Lugansk dijo que la situación en la ciudad es “muy inestable” y “los combates ocurren literalmente en cada entrada de los edificios”.
El sitio web de monitoreo colaborativo DeepState indica que los asentamientos en las afueras orientales de Toretsk (Pivnichne, Zalizne, Druzhba y Pivdenne) están total o casi completamente en manos rusas.
La situación cerca de Toretsk ha sido difícil durante meses; los enfrentamientos en las afueras de la ciudad se registraron en agosto.
Pero durante el último mes, Moscú ha intensificado su enfoque y sus ataques contra la ciudad, y las fuerzas rusas han estado avanzando hacia Toretsk desde fines de septiembre, utilizando ampliamente bombas guiadas altamente destructivas.
La situación también se ha vuelto cada vez más difícil en el este de Ucrania el principal objetivo de la incursión total del Kremlin desde la captura de Ugledar hace menos de una semana.
Al igual que Ugledar, Toretsk ha sido una ciudad de primera línea durante más de 10 años debido a su cercanía a los territorios de Ucrania confiscados por Rusia en 2014.
¿Qué significaría la toma de Toretsk?
Con una población de más de 30.000 habitantes antes de la invasión a gran escala, Toretsk ha sido en gran parte destruida y devastada, con la mayoría de los edificios destrozados y solo unos 1.600 residentes permaneciendo en la ciudad después de numerosas evacuaciones.
Si las fuerzas rusas logran capturar la ciudad, ayudará a Rusia a obstruir las rutas logísticas claves de Ucrania, conectando la retaguardia operativa y la zona de combate.
Los intensificados ataques rusos también demuestran la superioridad de Moscú en personal y material, mientras Ucrania pide más armas y apoyo a sus aliados occidentales.