Durante su intervención en la Asamblea de las Naciones Unidas, el canciller de Venezuela, Yván Gil, rechazó la aplicación de medidas coercitivas unilaterales, las cuales argumentó violan la carta de Naciones Unidas.
“La ilegal aplicación de medidas coercitivas unilaterales contra pueblos enteros por parte de Estados Unidos de América y de la Unión Europea representa una flagrante violación a la Carta de Naciones Unidas y de toda norma de derecho internacional”, refirió el ministro de Relaciones Exteriores.
Son violaciones de los derechos humanos y un crimen de lesa humanidad, recalcó Gil, mientras insistió que reitera el llamado al levantamiento inmediato de todos los regímenes de mal llamadas sanciones y los bloqueos que son aplicados contra más de un tercio de toda la humanidad incluyendo 30 millones de venezolanas y venezolanos.
Al transmitir la solidaridad de su Gobierno con Bielorrusia, República Democrática de Corea, de Cuba, Eritrea, Irán, Nicaragua, Zimbabue y tantos otros que sufren día a día los efectos de dichas políticas, el político de Venezuela manifestó que los pueblos dignos que luchan por su soberanía también han levantado su voz en estos espacios y deben ser escuchados.
“Venezuela enfrenta los embates de diversas formas de colonialismo. Washington ha buscado por todos los medios destruir nuestro sistema democrático, nuestras instituciones, soberanía, independencia y el derecho inalienable de nuestro pueblo a la libre determinación”, subrayó.
Gil destacó que se trata de un gran plan de recolonización que busca a partir de un golpe de Estado para destruir nuestra República, además de la imposición de un feroz bloqueo con casi 1.000 sanciones que ha costado a nuestra nación 642 millardos de dólares tan solo en los últimos siete años.
A esto se suma, de acuerdo al canciller, las pérdidas de nuestra estatal petrolera PDVSA que ascienden a 232 mil millones de dólares y el robo de 31 toneladas de oro depositadas en el Banco de Inglaterra, así como otros activos propiedad de la República en el extranjero, sin olvidar el robo por parte de Argentina y Dominicana de aeronaves al servicio del Estado venezolano.
Venezuela no es la única que padece el intervencionismo. La doctrina Monroe sigue acechando, recalcó Gil mientras destacó la valentía del pueblo cubano al resistir más de 60 años de bloqueo.
Sobre la libre determinación de los pueblos
Toda la solidaridad para los pueblos que luchan por su autonomía y libre determinación, dijo al tiempo de reconocer que es hora que los anhelos de libertad nuestros hermanos y hermanas del Sahara Occidental, de Puerto Rico, Nueva Caledonia, la Polinesia francesa, Bonaire sean realizados.
Al destacar que Venezuela es un país con una profunda vocación anticolonial, Gil precisó que estamos decididos a contribuir con el fin del colonialismo en todas sus manifestaciones y formas.
Seguiremos reclamando los derechos de soberanía del Archipiélago de Chagos y las Islas Malvinas a sus legítimos dueños como son la Isla de Mauricio y la República Argentina respectivamente.
El pueblo argentino podrá contar con Venezuela en ese justo reclamo, afirmó.
Sobre Palestina recalcó además que por primera vez en la historia de esta Asamblea la delegación de Palestina se sienta como un estado más y es urgente su incorporación como integrante pleno.