El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha advertido este domingo a los rebeldes hutíes de Yemen de que pagarán “un alto precio” por “cualquier intento” de hacer daño a Israel tras el ataque registrado horas antes en el centro del país, cerca de Tel Aviv.
”Aquellos que necesiten un recordatorio sobre este asunto están invitados a visitar el puerto de Hodeida. Cualquiera que nos ataque no escapará de nuestros brazos”, ha subrayado al inicio de una reunión de su gabinete, según ha recogido su oficina en X.
El primer ministro israelí se refería así al bombardeo llevado a cabo por las fuerzas israelíes el pasado 20 de julio contra el puerto de Hodeida en represalia por el ataque con dron lanzado por los hutíes contra Tel Aviv, que se cobró la vida de una persona.
Netanyahu ha dedicado unas palabras también a la situación en la frontera norte de Israel en medio del aumento de los ataques por parte del partido-milicia chií Hezbolá y ha afirmado que las autoridades harán “lo que sea necesario” para garantizar la seguridad de los residentes.
Los sistemas de defensa antiaérea israelíes han derribado hace unas horas un misil lanzado desde Yemen, si bien restos de metralla han caido en áreas abiertas en el bosque de Ben Shemen, cerca de Kfar Daniel, así como en una estación de tren cerca de Modiin.
El portavoz de operaciones militares de los hutíes, Yahya Sari, ha reivindicado el ataque, llevado a cabo con un “nuevo misil hipersónico” contra “la ocupada región de Jaffa” que ha recorrido 2.040 kilómetros en cerca de 11 minutos.