La presidenta Xiomara Castro consideró como intolerable los intentos de intervencionismo por parte de Estados Unidos y ordenó la ruptura del tratado de extradición con dicho país.
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, ha ordenado la ruptura del tratado de extradición con Estados Unidos como represalia a unas declaraciones de la embajadora norteamericana, Laura Dogu, en las que ésta criticaba las relaciones del Gobierno hondureño con Venezuela y el presidente Maduro.
“La injerencia y el intervencionismo de los Estados Unidos, así como su intención de dirigir la política de Honduras a través de su Embajada y otros representantes, es intolerable” comentó en la red social X la presidenta hondureña, Xiomara Castro.
Asimismo refirió que “agreden, desconocen y violan impunemente los principios y prácticas del derecho internacional, que promueven el respeto a la soberanía y autodeterminación de los pueblos, la no intervención y la paz universal”.
“Con fundamento en nuestra Constitución y en los tratados internacionales, he ordenado al Canciller Enrique Reina denunciar el tratado de extradición con los Estados Unidos” subrayó la presidente.
En este sentido las manifestaciones de la presidenta se realizaron en el marco de declaraciones de la Embajadora de EE.UU. en Honduras, Laura Dogu, quien señaló supuestos vínculos de Venezuela con el narcotráfico.
Asimismo acusó sin pruebas al ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, de ser un presunto «narcotraficante”. Al tiempo que expresó preocupación por los estrechos vínculos sostenidos entre las naciones hermanas de Honduras y Venezuela.
Estas declaraciones no solo fueron rechazadas por la presidenta Castro. El Secretario de Estado en el Despacho de Defensa Nacional, José Manuel Zelaya Rosales, quien sostuvo una reunión con su homólogo venezolano esta semanas respondió que “Honduras, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y Fuerzas Armadas de Honduras (FFAAHN) somos respetuosos del Derecho Internacional y no podemos juzgar a EEUU ni a Venezuela”.
“Asistimos a reuniones con las autoridades de EstadosUnidos, conscientes que ellos son tolerantes, protegen y nunca capturan sus narcotraficantes que operan dentro de EEUU.» ironizó Zelaya, quien fue derrocado por un golpe blando en 2009 y Washington no se tardó en reconocer al gobierno de facto de Roberto Micheletti.
Y concluyó: Este ataque de la embajadora es hipócrita y cínico.