El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, ha pedido este lunes poner en marcha medidas que permitan “purgar” el servicio encargado de la protección de los altos cargos del Gobierno tras la presunta infiltración de supuestos espías rusos que buscaban sacar adelante un plan para asesinarlo.
Así se lo ha comunicado al nuevo jefe del servicio en cuestión, Oleksii Morozov, que ha sido nombrado tras desarticular el complot anterior siguiendo las informaciones del Servicio de Seguridad Estatal (SBU), la Inteligencia ucraniana, según ha informado el presidente en un mensaje en su cuenta de Telegram.
El pasado mes de mayo, fuentes de la Inteligencia apuntaron a que dos coroneles formaban parte de este entramado para matar a Zelensky y otros altos cargos del Gobierno en un intento por “hacer un regalo al presidente ruso, Vladimir Putin”. Entre los posibles objetivos del grupo se encontraba también el jefe de la Inteligencia militar de Ucrania, Kirilo Budanov.
Zelensky ha dado la bienvenida al coronel Morozov como nuevo jefe del servicio de protección y ha aseverado que el objetivo principal es garantizar que “solo los que ven su futuro ligado al de Ucrania podrán trabajar para la agencia”. Además, ha aclarado que la Administración “necesita modernizar su estructura y sus operaciones para cumplir los requisitos actuales en tiempos de guerra. Necesitamos un nuevo enfoque sin caer en el sovietismo”, ha aclarado.
“Por supuesto, debemos limpiar la Administración de todos aquellos que eligen otra cosa que no sea Ucrania o que busquen desacreditar a la Oficina de Seguridad Estatal. Vuestra tarea es la seguridad de las instituciones del Estado, así que doy las gracias a aquellos que realizan su labor con la más absoluta de las integridades”, ha sostenido.