Starmer critica también las “lamentables” palabras de Farage.
El primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, ha criticado al líder del partido Reforma, el populista Nigel Farage, por decir que Occidente ha provocado la guerra de Ucrania, un argumento “completamente erróneo” que “le hace el juego” al presidente de Rusia, Vladimir Putin.
“Putin es un hombre que desplegó un agente nervioso en las calles de este país, que está haciendo tratos con países como Corea del Norte, y este tipo de apaciguamiento es peligroso para la seguridad nacional, la seguridad de nuestros aliados que dependen de nosotros, y sólo envalentona aún más a Putin”, ha declarado Sunak a la cadena BBC. “Lo que Farage ha dicho es completamente erróneo y sólo le hace el juego a Putin”, ha añadido Sunak.
También el ministro del Interior de Reino Unido, James Cleverly, ha acusado este viernes a Farage de secundar los argumentos del Gobierno ruso en favor de la invasión de Ucrania. “Simplemente, éste es Farage haciéndose eco de la vil justificación de Putin para la brutal invasión de Ucrania”, ha criticado Cleverly en una publicación en su cuenta en la red social X.
Por su parte, el líder del Partido Laborista, Keir Starmer, ha criticado las “lamentables” palabras de Nigel Farage, el líder del partido ultraderechista Reforma, sobre la responsabilidad de Occidente en la guerra de Ucrania.
El presidente ruso, Vladimir Putin, “tiene toda la responsabilidad” de la “agresión rusa” sobre Ucrania. “Cualquiera que quiera ser representante en nuestro Parlamento debe dejar claro que estamos en contra de esa agresión, ya sea en el campo de batalla o en Internet”, ha argumentado.
La publicación de Cleverly iba acompañada de unas declaraciones de Farage en las que afirma que “Occidente ha provocado la guerra en Ucrania”, palabras pronunciadas durante una entrevista para la BBC en la que ha señalado que “por supuesto que es culpa suya”, pero que “ha utilizado lo que hemos hecho como excusa” y que “nosotros provocamos esta guerra”.
“Me alcé ante el Parlamento Europeo en 2014 y dije, cito textualmente, ‘Habrá una guerra en Ucrania’. ¿Por qué? Era obvio para mí que la expansión cada vez mayor hacia el este de la OTAN y la Unión Europea estaba dando a este hombre (Vladimir Putin) una razón para decir al pueblo ruso ‘vienen a por nosotros otra vez’ y para ir a la guerra”, ha argumentado Farage en una de sus intervenciones.
“Soy la única persona en la política británica que predijo lo que ocurriría y, por supuesto, todo el mundo dijo que yo era un paria por atreverme a sugerirlo”, ha agregado el político populista, asegurando que le “disgusta” Putin, pero que le “admira como operador político porque ha conseguido hacerse con el control de la gestión de Rusia”.
Farage, uno de los líderes de la campaña para la salida de Reino Unido de la Unión Europea, anunció a principios de junio su regreso a la política no solo con la vuelta al liderazgo del partido Reforma, sino también con su candidatura para los próximos comicios del 4 de julio.
Este anuncio llegó apenas diez días después de que asegurara que no se presentaría como candidato a las elecciones parlamentarias, lo que supuso un giro radical en su postura y la vuelta a la cúpula de la formación que ya lideró durante dos años entre 2019 y 2021.
Farage ha asegurado que vuelve a la política “para los próximos cinco años” y que su principal objetivo es que su partido consiga más votos que UKIP –formación euroescéptica que él mismo lideró durante años– en las elecciones de 2015, cuando consiguió convencer a casi cuatro millones de votantes.
Reino Unido celebrará elecciones generales el 4 de julio, en virtud de un adelanto anunciado el 22 de mayo por el primer ministro del país, Rishi Sunak, que hasta ese momento se había limitado a asegurar en público que la votación tendría lugar en la segunda mitad del año.
A menos de un mes para la cita electoral en Reino Unido, las encuestas siguen sonriendo al Partido Laborista, que según los últimos sondeos podría llegar a cosechar un resultado histórico en las próximas elecciones generales con hasta 425 escaños en la Cámara de los Lores; mientras que el Partido Conservador mantiene su tendencia a la baja y podría lograr el peor resultado en más de cien años.