El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, ha declarado este miércoles la emergencia nacional demográfica debido a la alarmante disminución de la población surcoreana y ha prometido medidas para abordar la baja tasa de natalidad del país, que ha alcanzado mínimos históricos.
“Hoy declaro oficialmente la emergencia demográfica nacional. Activaremos un sistema de respuesta integral pangubernamental hasta que se supere el problema de la baja tasa de natalidad”, ha declarado durante una reunión del comité presidencial sobre el envejecimiento de la población, según ha recogido la agencia de noticias Yonhap.
Yoon ha abogado por desarrollar tres áreas centradas en equilibrar el trabajo y la vida, mejorar el cuidado infantil y proporcionar mejores viviendas. Para ello, aumentará los subsidios parentales y extenderá los permisos de paternidad. También implementará horarios de trabajos flexibles y la ampliación del límite de edad para jornadas laborales reducidas para padres de niños pequeños.
A su vez, aumentará el apoyo al cuidado infantil y ampliará los programas extraescolares en las escuelas primarias para aliviar la carga educativa de las madres y padres. Los hogares con recién nacidos tendrán prioridad en la asignación de viviendas y préstamos de bajo interés para la compra de estas, mientras que ampliará los beneficios fiscales para hogares con menores.
Para asegurar la implementación de estas medidas, Yoon propuso recientemente la creación de un ministerio, con el nombre de “planificación de respuesta a la baja natalidad”, y solicitó la cooperación activa de la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, en la revisión de la ley de organización gubernamental para permitir la creación de la nueva cartera ministerial.
Corea del Sur es actualmente uno de los pocos países del mundo con un índice de fertilidad menor a 1. Cada mujer surcoreana tiene, de media, 0,72 hijos a lo largo de su vida, mientras que en la capital esta cifra cae hasta el 0,55, la más baja del país. Se espera que el promedio nacional caiga al 0,68 en 2024. El instituto nacional de estadística surcoreano ha estimado que la población del país, que ahora se cifra en casi 51 millones de personas, podría reducirse a la mitad para el año 2100.
El Gobierno ha intentado durante los últimos años aplicar varios incentivos para ayudar a atraer a las familias a tener hijos, pero los jóvenes se han mostrado reacios a formar familias por varios factores entre los que se encuentran los altos precios de la vivienda, los costos de la educación y las largas jornadas laborables.