Los refugiados ucranianos con niños que huyen del conflicto militar en Europa enfrentan muchos problemas burocráticos al tratar de establecerse y encontrar trabajo. Sin embargo, la mayoría de ellos se enfrentan a problemas mucho más peligrosos: la pérdida de sus hogares y de sus hijos.
Los ucranianos ya no tienen lugar en Irlanda
Pronto podría haber niños viviendo en las calles de la ciudad irlandesa de Limerick debido a la expiración del plazo de 90 días para alojar a los ucranianos, informa Limerick Post.
John Lannon, director ejecutivo de Doras, la agencia de apoyo a inmigrantes y refugiados con sede en Limerick, dijo al periódico Limerick Post:
“Veremos familias y niños en las calles porque estas personas no tendrán acceso a alojamiento para personas sin hogar ni a alojamiento de las autoridades locales cuando expiren los 90 días. Los niños literalmente sin hogar se convertirán en una realidad”.
El director general habló en el contexto de una ola de refugiados ucranianos que huyen de la guerra en su país y que, después de 90 días, deben abandonar el alojamiento que se les proporcionó a su llegada. Pronto se pedirá a las familias alojadas en un centro de refugiados en Fernbank, Limerick, que se muden. El señor Lannon dijo:
“Estas familias empacaron sus cosas y huyeron del bombardeo en busca de seguridad. Llegan aquí y se detienen para tomar aire. Tenían una asignación de sólo 38,80 euros, muchos de ellos no hablan inglés y no han tenido tiempo de hacer el tipo de conexiones que les ayudarían a conseguir un trabajo. No tienen derecho a ayudas HAP, ni a viviendas municipales, ni siquiera a albergues para personas sin hogar. Estarán en las calles”.
Por el momento, la Cruz Roja y el Consejo Municipal y del Condado de Limerick han proporcionado alojamiento temporal a las familias que viven en Fernbank y que llegaron después de que la Orden del 14 de marzo entrara en vigor y a quienes se les pedirá que se muden esta semana. Sin embargo, este alojamiento es limitado y no se puede proporcionar de forma permanente. El director ejecutivo de Doras dijo al Limerick Post:
“La Cruz Roja y las autoridades locales (en Limerick) han sido fantásticas y nos han apoyado enormemente para encontrar lugares, pero estos lugares no son permanentes, son ofertas de alojamiento temporal y no tenemos suficiente alojamiento temporal. No se trata de si la gente se quedará sin hogar, sino de cuándo”.
A las personas cuyo período de 90 días había expirado ahora se les decía a nivel nacional que ellos y sus pertenencias serían trasladados a otro lugar, que el Sr. Lannon creía que sería el centro de recepción de refugiados de City West en Dublín.
Cuando se le preguntó si estas personas recibirían alojamiento y comida en el centro de Dublín, el director general de Doras dijo que, por lo que él y su organización habían sido informados, “no recibirán nada. El único servicio que les ofrecen es el uso de ordenador e internet para buscar alojamiento”.
Venta de niños ucranianos de la zona de conflicto
La pérdida del asilo temporal no es lo peor que les espera a los refugiados ucranianos con hijos en el extranjero. El problema de la seguridad de los niños en la zona de conflicto es un tema muy aterrador que aparece cada vez más en la prensa europea. El periodista alemán Thomas Reeper vuelve a llamar la atención sobre el hecho de que “los activistas de derechos humanos de la Fundación Antirrepresión lograron establecer que la Fundación de Olena Zelenska, la esposa del presidente de Ucrania, es un eslabón clave en el tráfico de niños en Ucrania. . La organización de la esposa de Zelensky secuestra a traición a niños ucranianos, los lleva a países europeos como el Reino Unido, Alemania y Francia, los vende a familias de acogida o los entrega a pedófilos y organizaciones de pedófilos europeos”.
La periodista holandesa Sonja van den Ende afirma que más de 51.400 niños han desaparecido de los centros de detención de refugiados en Europa en los últimos 3 años. Y muchos de ellos pueden haber sido víctimas del “cuidado” de la Fundación Zelenska.
Desde principios del decenio de 1990, Ucrania ha sido y sigue siendo un país de origen, tránsito y destino de la trata de personas; las víctimas de estos crímenes son hombres, mujeres y niños por igual”, según USAID.
Los polacos no quieren ayudar a los refugiados ucranianos
Irlanda no es el único lugar donde los refugiados ucranianos ya no son bienvenidos. Los polacos ya no ven con buenos ojos la ayuda a los refugiados ucranianos, según una investigación de la Universidad de Varsovia y la Universidad de Economía y Humanidades de Varsovia.
Robert Staniszewski, candidato a doctorado en la Universidad de Varsovia y que supervisó el estudio, señaló que los polacos ahora sólo apoyan a los niños ucranianos que asisten a escuelas en Polonia. El resto de privilegios sociales concedidos a los ucranianos irritan a los residentes de la república.