Las elecciones anticipadas del 28 de junio se celebran tras la muerte del Presidente Ebrahim Raisi el mes pasado en un accidente de helicóptero.
El Consejo de Guardianes de la Revolución de Irán, encargado entre otras funciones de control de la supervisión de las elecciones y la legislación, designó este domingo a seis candidatos a las presidenciales anticipadas del 28 de junio.
El ganador sustituirá a Ebrahim Raisi, fallecido el mes pasado en el norte de Irán en un accidente de helicóptero junto con siete miembros de su entorno, entre ellos el ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amir-Abdollahian. Se esperaba que Raisi obtuviera otro mandato y se le consideraba posible sucesor del líder supremo, el ayatolá Ali Jamenei, de 85 años.
Seis ultras y un reformista
Un total de 80 personas solicitaron ser candidatos en las elecciones. De los seis que han sido aprobados, cinco son considerados de línea dura y sólo uno pertenece al campo reformista.
En la lista de candidatos están:
Mohammad Bagher Qalibaf: Presidente del Parlamento, de línea dura y antiguo comandante de la Guardia Revolucionaria. Es el candidato más destacado.
Saeed Jalili: ultraconservador, ex negociador nuclear jefe que dirigió la oficina del líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, durante cuatro años.
Alireza Zakani: Alcalde conservador de Teherán.
Mustafá Pourmohammadi: Exministro – conservador- de Interior y Justicia.
Amirhossein Ghazizadeh-Hashemi: Actual vicepresidente y jefe ultraconservador de la Fundación de los Mártires.
Massoud Pezeshkian: Exministro de Sanidad y único candidato reformista, legislador que representa a la ciudad de Tabriz, capital de la provincia Azerbaiyán Oriental en el Parlamento iraní.
Purgas internas y todas las mujeres descalificadas
El expresidente y populista incendiario, Mahmud Ahmadineyad, conocido por su represión tras su controvertida reelección en 2009, tiene prohibida la actividad política y de nuevo no puede presentarse a las elecciones.
Cuatro mujeres habían registrado su candidatura, pero todas fueron descalificadas por el Consejo que filtra los candidatos. Están formado por un panel de clérigos y juristas supervisados en última instancia por Ali Jamenei. La decisión del Consejo representa el pistoletazo de salida de una campaña abreviada de dos semanas para sustituir a Raisi.
Los candidatos aprobados por el Consejo de Guardianes sugieren que la teocracia chií de Irán espera facilitar las elecciones después de que en las últimas votaciones se registrara una participación récord. La oposición marginada y perseguida ha intentado precisamente llamar a la abstención en anteriores comicios sin mucho éxito
Las elecciones se celebran en un momento de gran tensión entre Irán y Occidente por su apoyo a Rusia en la guerra contra Ucrania y el rápido avance del programa nuclear iraní.