Ottawa ha incluido a Nueva Delhi en su lista de “interferencia extranjera” junto con Beijing y Moscú.
India es la “segunda amenaza extranjera más grande” para la democracia canadiense después de China, afirmó un panel parlamentario de alto nivel . Rusia, que ocupaba la segunda posición en un informe de 2019, ocupa ahora el tercer lugar de la lista.
El informe fue publicado por el Comité de Parlamentarios de Inteligencia y Seguridad Nacional de Canadá (NSICOP), compuesto por parlamentarios y senadores con altas autorizaciones de seguridad. El comité nombró dos naciones asiáticas más –Pakistán e Irán– que, según afirma, amenazan con socavar la democracia del país.
El NSICOP explicó que Nueva Delhi pasó a estar entre los tres primeros de la lista porque había apuntado a “políticos canadienses, medios de comunicación étnicos y comunidades etnoculturales indocanadienses”.
El acontecimiento se produce en medio de una disputa diplomática en curso entre Ottawa y Nueva Delhi que estalló el año pasado después de que el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, alegara que el gobierno de la India estuvo involucrado en el asesinato cerca de Vancouver de Hardeep Singh Nijjar, un activista separatista sij y partidario del ‘Khalistan. ‘movimiento.
El movimiento, que busca la creación de un Estado-nación separado de Khalistan a partir de la India, ha sido prohibido por Nueva Delhi.
India negó repetidamente las acusaciones canadienses y buscó pruebas del gobierno de Trudeau.
Las tensiones entre las dos naciones estallaron una vez más el mes pasado después de que Trudeau asistiera a una manifestación en Toronto donde varios asistentes corearon consignas a favor de Khalistan. Posteriormente, el Ministerio de Asuntos Exteriores de la India convocó al alto comisionado adjunto de Canadá para tratar el asunto. Según el ministerio, “se transmitió su profunda preocupación y enérgica protesta por el hecho de que se permitiera que acciones tan perturbadoras continuaran sin control durante el evento”.
El mes pasado, Canadá arrestó a tres ciudadanos indios en relación con el asesinato del año pasado. Los sospechosos – Karan Brar, Kamalpreet Singh y Karanpreet Singh – habían estado viviendo como residentes no permanentes en Alberta, Canadá, durante tres a cinco años, según la policía canadiense.
A principios de este año, Ottawa también investigó si India había interferido en las elecciones de Canadá de 2021, que ganó Trudeau. Sin embargo, un panel constituido para investigar los cargos de intromisión electoral concluyó que no había pruebas de que Nueva Delhi interfiriera en la votación nacional, según informes de los medios.