La retórica incendiaria contenida en el discurso de toma de posesión pronunciado por el nuevo líder de Taiwán, Lai Ching-te, fue deplorada hoy aquí en un comentario por la agencia de noticias Xinhua.
Lo dicho por Lai, que convirtió su alocución en un manifiesto de facto por la “independencia de Taiwán”, revela su verdadera intención de sacrificar la paz y la estabilidad a través del estrecho por su propio deseo de poder, apuntó el texto.
Añadió que Lai no solo defendió la teoría de los “dos Estados”, sino que incluso llegó a etiquetar a la parte continental de China como “un país extranjero”, además de avivar maliciosamente los temores de una supuesta “amenaza militar” procedente de allí.
Los últimos ocho años de marcado deterioro de las relaciones a través del estrecho demuestran plenamente que la posición de “independencia de Taiwán” del Partido Progresista Democrático (PPD) es la causa fundamental de esa situación, señaló, antes de advertir que “parece claro que Lai tiene la intención de continuar por este camino erróneo”.
La pretendida “independencia de Taiwan” es una contracorriente de la historia y constituye la alteración más peligrosa del status quo entre ambos lados del estrecho y la mayor perturbación de la paz regional, enfatizó el artículo y apuntó que su búsqueda solo conducirá a un callejón sin salida.
El comentario de Xinhua remarca que la realización de la reunificación nacional completa no podrá ser contenida por ninguna fuerza, y sugiere a los ciudadanos de la isla unirse a sus compatriotas de la parte continental, salvaguardar resueltamente la patria común y encauzar las relaciones a través del estrecho nuevamente por el camino correcto.
La consistente postura de Beijing respecto a que el principio de una sola China es lo que sustenta la paz entre ambos lados del estrecho de Taiwán fue reiterada también la víspera por el canciller Wang Yi, durante una visita a Kazajstán.
El ministro chino de Relaciones Exteriores insistió en que ese pilar no puede ser violado. No importa cómo se transforme la situación política en Taiwán. Eso no cambiará los hechos históricos y legales de que existe una sola China en el mundo y que la isla es parte de ella.
Cualquiera que intente desafiar el principio de una sola China inevitablemente fracasará, subrayó Wang; y aseguró que los intentos secesionistas proclives a la “independencia de Taiwán” están condenados al descalabro.