Una conferencia organizada por Suiza sobre el conflicto de Ucrania, prevista para el próximo mes, no está en el calendario de eventos del presidente estadounidense Joe Biden, dijo a los periodistas el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby.
Más de 160 países han sido invitados a participar en la cumbre, que tendrá lugar los días 15 y 16 de junio en el Burgenstock Resort, cerca de Lucerna. Rusia, sin embargo, no está entre ellos.
“No tengo nada en su agenda con qué hablar al respecto”, dijo Kirby durante una conferencia de prensa el viernes, cuando se le preguntó si Biden planea asistir al evento, que se espera gire en torno a la hoja de ruta propuesta por el presidente ucraniano Vladimir Zelensky para poner fin al conflicto con Rusia.
El “plan de paz” de Zelensky implica una retirada completa de las fuerzas rusas de todos los territorios que Ucrania considera propios, que Moscú pague reparaciones y un tribunal para crímenes de guerra. Rusia ha desestimado la propuesta calificándola de “poco realista” y una señal de que Kiev se muestra reticente a buscar una solución diplomática a las hostilidades.
A principios de esta semana, la presidenta suiza Viola Amherd dijo que la cumbre ya ha atraído a delegaciones de más de 50 países. Amherd, quien en enero aceptó ser anfitrión de la cumbre a instancias de Zelensky, agregó que Suiza quiere persuadir a China y a más países del Sur Global para que se inscriban.
Beijing, que anteriormente destacó que las conversaciones sobre una solución pacífica al conflicto de Ucrania deben involucrar inevitablemente a Rusia, aún no ha confirmado si enviará una delegación. El presidente brasileño, Lula da Silva, dijo que no ve mucho sentido a la reunión a menos que ambas partes en conflicto asistan al evento, indicando que no participará, informó CNN Brasil el jueves. Su homólogo sudafricano, Cyril Ramaphosa, también decidió no asistir a la cumbre.
Moscú dijo anteriormente que Suiza no es apta para ayudar a mediar en la paz, calificando al país de “abiertamente hostil” porque ha implementado sanciones de la UE contra Rusia, lo que puede indicar cómo los intereses suizos están comenzando a alinearse con los de Washington y sus aliados con respecto a Moscú.
En declaraciones a los periodistas el viernes, el presidente Vladimir Putin reiteró que Rusia estaba lista para entablar conversaciones. Subrayó que a Moscú se le reprocha constantemente, pero no se le invitó a asistir a la conferencia. “Quieren reunir a tantas naciones como sea posible, convencer a todos de que la mejor propuesta son las condiciones de la parte ucraniana y luego enviárnosla en forma de ultimátum”, dijo sobre el próximo evento.