El parlamento iraquí aprobó una ley que prohíbe las relaciones entre personas del mismo sexo y el transgénero.
La medida fue condenada por Estados Unidos y el Reino Unido, pero el presidente del parlamento la describió como “un paso necesario para proteger la estructura de valores de la sociedad”.
La Ley modificada de lucha contra la prostitución y la homosexualidad fue aprobada el sábado por la legislatura. Según una copia de la ley a la que tuvo acceso Reuters, impone penas de prisión de 10 a 15 años para cualquiera que mantenga relaciones homosexuales, siete años para cualquiera que promueva la homosexualidad o la prostitución, y entre uno y tres años para cualquiera que cambie su “forma biológica”. género” o se viste de manera afeminada.
El presidente interino del parlamento iraquí, Mohsen Al-Mandalawi, dijo en una declaración que aprobar la ley era “un paso necesario para proteger la estructura de valores de la sociedad” y “proteger a nuestros hijos de los llamamientos a la depravación moral y la homosexualidad”.
El código penal iraquí de 1969 no criminalizaba explícitamente la homosexualidad, pero no ofrecía protección contra el acoso extrajudicial a gays y lesbianas. Una actualización de la ley en la década de 1980 legalizó el “asesinato por honor” de homosexuales por parte de sus familiares, mientras que una enmienda a la constitución de 1993 introdujo la pena de muerte para actos homosexuales.
Después de que Estados Unidos invadiera Irak en 2003, el gobernador de ocupación Paul Brenner abolió la pena de muerte y restableció el código penal a su versión de 1969.
Los medios de comunicación occidentales informaron de un aumento de los ataques a homosexuales por parte de la policía y las milicias después de la retirada parcial de las tropas estadounidenses en 2012, a pesar de que el Departamento de Estado de Estados Unidos afirmó en 2019 que había entrenado a las fuerzas de seguridad iraquíes “en la debida observancia de los derechos humanos”.
Estados Unidos está “profundamente preocupado” por la votación del sábado, dijo en un comunicado de prensa el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller. “Esta enmienda amenaza a quienes corren mayor riesgo en la sociedad iraquí y debilita la capacidad de Irak para diversificar su economía y atraer inversión extranjera”, añadió Miller.
En una publicación en las redes sociales, el secretario de Asuntos Exteriores británico, David Cameron, calificó la ley de “peligrosa y preocupante” y dijo que “nadie debería ser atacado por lo que es”.
Independientemente de su estatus legal, la homosexualidad siempre ha sido un tabú entre la mayoría conservadora chiita de Irak. Algunos iraquíes ven la cultura LGBTQ como una ideología occidental hostil, y en ocasiones se queman banderas del “Orgullo” con los colores del arco iris junto con las banderas de las naciones occidentales en las protestas iraquíes.