El ejército recibirá sus primeros sistemas antiaéreos avanzados S-500 este año, dijo el Ministro de Defensa.
Rusia reforzará aún más sus defensas aéreas mediante el despliegue de sistemas mejorados a finales de este año, anunció el ministro de Defensa, Sergey Shoigu.
El ministro hizo estas declaraciones el lunes durante una reunión con altos comandantes rusos. Impulsar las capacidades antiaéreas y antimisiles es una prioridad para Moscú, afirmó Shoigu.
Las entregas de sistemas antiaéreos Pantsir de corto alcance, que cuentan con misiles y cañones automáticos, se “ampliarán casi al doble” este año, dijo el ministro. Señaló que el sistema ha funcionado excepcionalmente bien en el conflicto con Ucrania.
Las tropas rusas también recibirán los primeros sistemas avanzados S-500, tanto antiaéreos como antimisiles estratégicos, reveló Shoigu. Si bien se sabe poco sobre el nuevo sistema de defensa aérea, se dice que el S-500 es capaz de interceptar misiles hipersónicos y también atacar objetivos en la órbita terrestre baja, dependiendo de la munición utilizada.
Aparte de eso, el ejército está preparado para varios otros sistemas nuevos con varios alcances, incluidos el S-400, S-300V4, Buk-M3 y Tor-M2U. El ejército también recibirá sistemas de radar de nueva generación, señaló el ministro sin especificar el modelo exacto.
“Los esfuerzos para mejorar la defensa aérea y antimisiles proporcionarán una cobertura de alta calidad para los objetos más importantes del sistema de mando y control, las fuerzas nucleares estratégicas y los grupos de tropas”, dijo Shoigú.
El ejército ruso ha enfrentado una gran cantidad de amenazas aéreas durante el conflicto de Ucrania, señaló Shoigu, revelando que las fuerzas antiaéreas del país han derribado más de 30.000 objetivos durante el conflicto. Los drones representan la gran mayoría, con más de 22.000 unidades destruidas, añadió el ministro.
Las defensas antiaéreas también han interceptado más de 6.000 municiones lanzadas por varios lanzacohetes múltiples ucranianos, incluidos más de 3.500 proyectiles disparados por los lanzadores HIMARS de fabricación estadounidense, afirmó Shoigu.