La creación de la empresa mixta petrolera Roraima y la extensión territorial de su similar Petroquiriquire demuestra hoy el empeño del Estado venezolano por seguir desarrollando el sector, en medios de condiciones adversas.
Ambas entidades fueron aprobadas este martes por la Comisión Permanente de Energía y Petróleo, con lo cual quedó demostrado que, pese al bloqueo, las medidas coercitivas y la ratificación o no de las sanciones en el área de los hidrocarburos contra Venezuela se sigue avanzando en negociaciones.
Ángel Rodríguez, titular de ese grupo de trabajo parlamentario, manifestó que la aspiración es aumentar la producción en función de suplir las necesidades sociales del pueblo venezolano.
El legislador comentó que en el encuentro, de carácter extraordinario, aprobaron las propuestas, el informe, las variables, la inversión, los niveles de asociación, el área geográfica, la productividad en barriles de petróleo y pies cúbicos en gas, según nota de prensa.
Con la creación de las entidades mixtas petroleras queda demostrado que la inversión en el área energética se continuará profundizando en el país, y “se seguirán acercando fondos financieros internacionales y firmas privadas que desean invertir en Venezuela”, comentó.
Detalló que las acciones de participación de la empresa Roraima alcanzan el 51 por ciento para el Estado venezolano, mientras que el resto corresponderá a la empresa privada, en tanto que en Petroquiriquire la proporción del Estado es del 60 por ciento y en la empresa privada del 40.
Rodríguez afirmó que la creación de estas dos entidades está en correspondencia con los postulados de la Constitución nacional y la Ley de Hidrocarburos vigente.
El ministro de Petróleo Rafael Tellechea, quien junto a su equipo presentó los nuevos proyectos, reveló que existen 17 posibles acuerdos con empresas petroleras trasnacionales interesadas en invertir en la República Bolivariana y aseguró que “a pesar de las sanciones el crecimiento no se detendrá”.
Expresó que como nación con las mayores reservas de petróleo del mundo, tienen derecho de ser libres y utilizar las riquezas para impulsar el crecimiento económico nacional.
El también presidente de la empresa estatal Petróleos de Venezuela remarcó que Venezuela es un país soberano de paz y con mayor seguridad en materia energética, por lo que con sanciones o sin ellas “nos haremos respetar a nivel internacional como nación energética con miras hacia el crecimiento”.
No podemos permitir que las sanciones nos impidan extraer y comercializar nuestra riqueza, ratificó, vísperas de que concluya el plazo para que el gobierno de Estados Unidos renueve o no la licencia 44, referida al petróleo y el gas y que otorgó limitadas posibilidades al Estado venezolano.
Aseveró que si Venezuela deja de comercializar el crudo, se podría generar una subida de precios que afectaría también al pueblo estadounidense.
Tellechea apuntó que las sanciones perjudican tanto a los venezolanos como a los estadounidenses, especialmente, dijo, en el contexto de la escalada de conflictos bélicos en Europa, Asia y Medio Oriente.
Rodríguez declaró ayer que la ratificación de sanciones contra Venezuela profundizará la crisis energética tanto en Estados Unidos como en Europa.
El legislador consideró que “sería una decisión errada” del gobierno estadounidense proceder así.
Reflexionó que para la campaña electoral de Joe Biden tomar decisiones contra el petróleo venezolano, “implica un alza considerable en los hidrocarburos a nivel interno”.
El presidente Nicolás Maduro abundó el lunes sobre las conversaciones sostenidas con Estado Unidos, que derivaron en la firma de un acuerdo, el cual tenía por objetivo el levantamiento total de todas “las sanciones ilegales y criminales”.
Refirió que desde el mes de enero Washington comenzó a amenazar que va a quitar la licencia 44 otorgada hace seis meses, bajo el argumento de incumplimiento del Acuerdo parcial de Barbados firmado con la oposición sobre la promoción de derechos políticos y garantías electorales para todos.
Maduro calificó esa licencia de colonialista y estimó que Estados Unidos pretende monitorear, controlar y tutorear la industria petrolera nacional, para que Venezuela viva de las licencias que ellos dan.
“Pierden ustedes más y queriéndonos hacer un daño se hacen daño ustedes”, declaró, y aseguró seguirán adelante con licencia o sin licencia porque “nosotros no somos colonia gringa» y nadie nos va a parar en nuestra marcha económica, apostilló.