Unas pandillas en Haití tienen planeado demoler una prisión y la comisaría ubicada en la localidad de Kwadebouke, actos violentos que profundizarán la crisis de seguridad que vive hoy el país caribeño.
Según el medio digital AmeriqueInfo7 en su cuenta de la red social X, el bandido Jeff Larose coordinó estas acciones con Wilson Joseph, alias La muerte de Sanjou. La víspera, el primero de los mencionados con sus compinches demolió con un bulldozer la comisaría de Bonrepo, y ahora con Joseph tiene previsto dejar en ruinas la estación de policía y la penitenciaria de la comuna de Kwadebouke.
Los vecinos de ese asentamiento pidieron a la Policía Nacional de Haití impedir la materialización de ese plan, el cual puede ser ejecutado en cuestión de horas, días o semanas, pues ya está proyectado por las bandas criminales.
En las últimas horas, el Pastorado de la Primera Iglesia Bautista de Puerto Príncipe anunció que individuos armados saquearon varias veces el templo.
El clérigo de esta iglesia de 188 años de antigüedad enfatizó que el santuario está despojado de todo equipo relacionado con sonido, proyección, computadoras, ventilación, música y electrónica, entre otros medios.
Los pandilleros ya atacaron el aeropuerto, el puerto, escuelas, universidades, comisarías, prisiones, ministerios, sucursales bancarias, almacenes comunitarios y le prendieron fuego a un depósito de 96 mil metros cuadrados en la zona franca.
También arremetieron contra automóviles particulares, un seminario religioso y más de una docena de farmacias, y en demostración de que van en serio le quemaron la casa al director general de la Policía Nacional de Haití.