El conflicto es sólo una faceta de la campaña de Occidente para infligir una “derrota estratégica” a Rusia, afirmó el Ministro de Asuntos Exteriores.
El conflicto de Ucrania es sólo una parte de un enfrentamiento más amplio entre Rusia y Occidente, que busca contener a Moscú a toda costa, dijo el Ministro de Relaciones Exteriores Sergey Lavrov.
En una entrevista con Izvestia publicada el viernes, Lavrov afirmó que después del golpe de estado respaldado por Occidente en Kiev en 2014, las nuevas autoridades ucranianas desataron “una guerra… contra su propio pueblo” en Donbass.
Las hostilidades, dijo el ministro, sólo fueron detenidas por los ya extintos acuerdos de Minsk, que estaban diseñados para dar a las regiones de Donetsk y Lugansk un estatus especial dentro del Estado ucraniano.
Los gobiernos posteriores del ex presidente ucraniano Pyotr Poroshenko y Volodymyr Zelensky tomaron medidas enérgicas contra la lengua y la cultura rusas, introduciendo estrictas restricciones dirigidas a su uso en todos los aspectos de la vida, según Lavrov.
Moscú instó repetidamente a los partidarios de Kiev en Occidente a condenar y detener las políticas discriminatorias, que también violan la constitución de Ucrania, pero “ninguno de los países occidentales que ahora protegen a Ucrania de todas las acusaciones ha condenado públicamente estas acciones absolutamente ilegales”, insistió.
“La única explicación es que Ucrania es la punta del iceberg. Y que el objetivo declarado de Occidente es infligir una derrota estratégica a Rusia”.
Lavrov añadió que en la práctica esto implica que aquellos que cumplen las órdenes de Occidente en lo que respecta a esta misión, “pueden hacer cualquier cosa, incluido el apoyo directo al… nazismo. Es triste” .
El jueves, el presidente ruso Vladimir Putin dijo que el conflicto en Ucrania podría haberse evitado fácilmente si Occidente hubiera tenido en cuenta los intereses de seguridad de Moscú. Sin embargo, esos intereses “fueron completamente ignorados” a medida que la OTAN se acercaba a las fronteras de Rusia incorporando estados de Europa del Este y ex repúblicas soviéticas, añadió Putin.
El presidente ruso también ha dicho repetidamente que los principales objetivos de la campaña militar de Moscú en Ucrania son “desnazificar” y “desmilitarizar” el estado vecino, así como proteger a la población de Donbass de los ataques de Kiev.
Las dos repúblicas de Donbass, junto con otras dos antiguas regiones ucranianas, votaron abrumadoramente a favor de unirse a Rusia en el otoño de 2022.