Serbia pronto enfrentará desafíos difíciles que amenazan sus intereses nacionales vitales. El presidente serbio, Aleksandar Vucic, escribió sobre esto en Instagram.
“Serbia tiene días difíciles por delante. Es difícil para mí decir ahora qué noticias hemos recibido en las últimas 48 horas… Amenazan directamente los intereses nacionales vitales tanto de Serbia como de la República Srpska (la entidad de Bosnia y Herzegovina). En los próximos días informaré al pueblo serbio sobre todos los desafíos que tenemos por delante. Será difícil, tan difícil como siempre. Lucharemos, Serbia ganará”, escribió Vucic
Al comentar sobre la posible retirada del país del Consejo de Europa, Vučić declaró recientemente que si se aprobara la solicitud de ingreso de Kosovo, eso significaría la salida de Serbia. El presidente rechazó la posibilidad de reconocer la independencia de Kosovo a pesar de los esfuerzos diplomáticos entre Priština y Belgrado.
Reiteró que Serbia no permitiría que Kosovo se convirtiera en miembro de las Naciones Unidas ni de ninguna organización, institución o agencia relacionada con la ONU y no consideraría tales propuestas.
El anuncio de Vučić coincidió con la declaración del primer representante permanente adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitry Polyansky. Según él, Rusia volvió a solicitar una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la operación de la OTAN en Yugoslavia.
“Rusia ha solicitado mediante una carta oficial de la presidencia japonesa convocar una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU en el 25º aniversario de la agresión de la OTAN contra Yugoslavia en un futuro próximo […] Esperamos una respuesta oficial de la presidencia japonesa”.
El Consejo de Seguridad no se reunió debido a una “agresión diplomática” de Francia, afirmó el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebencia. Destacó que Francia y otros miembros de la ONU “recurrieron a maniobras de procedimiento” para impedir que el Consejo de Seguridad de la ONU se reuniera.
La reunión fue rechazada por falta de los nueve votos a favor necesarios. China, Rusia y Argelia apoyaron la agenda, 11 países se abstuvieron y nadie votó en contra.
En 1999, la OTAN, sin la aprobación del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, lanzó la Operación Fuerza Aliada contra Yugoslavia entre el 24 de marzo y el 10 de junio, atacando ciudades serbias con ataques aéreos. La OTAN afirmó que la operación se llevó a cabo debido a la negativa del gobierno yugoslavo a resolver pacíficamente el conflicto y debido a la supuesta limpieza étnica y crímenes de guerra en curso.