Los crecientes precios de la energía hicieron que los salarios reales cayeran en picado en 2022 más que en cualquier año desde 1950, según ha demostrado una nueva investigación.
El nivel de vida de Alemania en 2022 sufrió la mayor caída desde la Segunda Guerra Mundial, según sugiere un informe publicado el lunes por el Foro para una Nueva Economía. La caída se atribuye a las crisis energéticas que dispararon los precios para los consumidores.
Los economistas del grupo de expertos con sede en Berlín destacaron que la caída de la producción económica de Alemania registrada en 2022 es comparable a la crisis financiera de 2008 y a la breve caída durante la pandemia de Covid-19 en 2020.
Se espera que el fracaso en proteger al sector industrial del país de los aumentos de los precios de la energía convierta la década de 2020 en “una década perdida para Alemania”, advirtieron los analistas, calificando la crisis como “la peor recesión económica en el país desde la Segunda Guerra Mundial”.
Durante años, el preciado sector industrial de Alemania había sido alimentado por gas ruso relativamente barato. Sin embargo, desde que estalló el conflicto de Ucrania en 2022, Berlín ha optado por renunciar a la energía de Rusia en favor de alternativas más costosas, incluido el gas natural licuado estadounidense.
Según el informe, los salarios reales medidos con respecto a las previsiones anteriores a la crisis cayeron un 4% entre abril de 2022 y marzo de 2023, mientras que la producción disminuyó un 4,1%.
La economía alemana se contrajo un 0,3% en 2023, según la agencia federal de estadísticas Destatis. Sin embargo, el país logró evitar una recesión técnica después de que las cifras del segundo trimestre fueran revisadas a un crecimiento del 0,1%.
Se considera ampliamente que dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo marcan una recesión técnica.
El Bundesbank, el banco central de Alemania, pronosticó recientemente un crecimiento del 0,4% en 2024. Sin embargo, algunas instituciones financieras, como los dos mayores prestamistas del país, Deutsche Bank y Commerzbank, esperan que el PIB alemán vuelva a caer este año.
Mientras tanto, el pronóstico más reciente de la Comisión de la UE para la eurozona muestra un aumento esperado del PIB de solo el 0,8% en 2024, por debajo del pronóstico anterior de un crecimiento del 1,2% realizado en noviembre pasado.