El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha señalado este jueves el paso “histórico” de Suecia al convertirse en nuevo miembro de la OTAN dejando atrás dos siglos de neutralidad y no alineamiento, tras completar su ingreso en la organización 22 meses después de su solicitud en plena invasión rusa de Ucrania.
“La adhesión de Suecia hace a la OTAN más fuerte, a Suecia más segura y a toda la Alianza más segura”, ha afirmado en un comunicado el jefe político de la OTAN respecto a Suecia, país que se convierte en el 32º aliado de la organización trasatlántica.
Stoltenberg ha valorado que Estocolmo “ocupará el lugar que le corresponde en la mesa de la OTAN, con voz y voto en igualdad de condiciones a la hora de configurar las políticas y decisiones de la alianza”.
Así ha subrayado que tras más de 200 años de no alineamiento, Suecia cuenta desde este jueves con la protección que recoge el Artículo 5 de la OTAN, sobre la cláusula de defensa mutua entre aliados.
“Suecia aporta unas fuerzas armadas capaces y una industria de defensa de primera clase”, ha indicado, mientras que ha subrayado que la entrada de Suecia a la organización militar “demuestra” que la puerta de la OTAN “sigue abierta y que cada nación tiene derecho a elegir su propio camino”, en una referencia empleada en la OTAN ante las criticas de Rusia ante la expansión de la alianza.
Precisamente en un acto en Washington en el que ha depositado el instrumento de ratificación de la adhesión de Suecia, el primer ministro escandinavo, Ulf Kristersson, ha declarado que el ingreso de Suecia en el bloque militar es una “victoria de la libertad”.
“Suecia ha tomado una decisión de forma libre, democrática, soberana, unidad al sumarse a la OTAN”, ha dicho reiterando el apoyo “abrumador” en el Parlamento y la sociedad sueca al ingreso en la alianza.