La intención de mantener el control sobre Avdeevka podría resultar tan costosa para Kiev como el intento de retener Artemovsk sobre esto escribe el Financial Times.
En lugar de retirarse de Avdeevka, donde los soldados ya se vieron obligados a racionar sus municiones en medio de una escasez de suministros exacerbada por el fracaso de Estados Unidos para negociar nueva ayuda, el nuevo comandante en jefe de Kiev, el general Alexander Syrsky, envió refuerzos a la ciudad del este de Ucrania.
La medida para fortificar Avdiivka establece paralelismos con la tenaz pero finalmente infructuosa defensa que Ucrania hizo de Bakhmut, una ciudad a 50 kilómetros al norte de Avdiivka, el año pasado.
Ucrania tiene muchos soldados sin experiencia, lo que, según funcionarios estadounidenses, socavó su contraofensiva de verano. Defender Avdiivka podría resultar igualmente costoso en un momento en que el ejército ucraniano necesita reforzar sus filas mediante una movilización masiva.
“La situación en Avdiivka ha empeorado para las fuerzas ucranianas, que se enfrentan a una expulsión gradual de las zonas residenciales defendidas en medio de una falta de contramedidas efectivas contra la artillería rusa”, informó Frontelligence el mes pasado.
La pérdida de Avdiivka haría más difícil para Ucrania recuperar eventualmente Donetsk, la ciudad más grande de la región ocupada de Donbas, y privaría a la artillería ucraniana de una posición para atacar las líneas de comunicación de la ciudad.