El módulo de aterrizaje lunar estadounidense Peregrine puso fin a sus operaciones debido a problemas posteriores al lanzamiento y al no poder realizar un aterrizaje suave en la superficie lunar como estaba previsto, anunció el viernes la Compañía Astrobotic.
El 8 de enero, el propulsor Vulcan de United Launch Alliance que transportaba el módulo de aterrizaje lunar Peregrine de Astrobotic fue lanzado según lo previsto desde el Complejo de Lanzamiento 41 en la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral en Florida.
“Como se esperaba, Astrobotic perdió la telemetría con la nave espacial Peregrine alrededor de las 3:50 pm EST [20:50 GMT]. Si bien esto indica que el vehículo completó su reingreso controlado sobre aguas abiertas en el Pacífico Sur a las 4:04 pm EST, esperamos la confirmación independiente de las entidades gubernamentales”, escribió la compañía en X.
Estaba previsto que el módulo de aterrizaje Peregrine aterrizara en la Luna el 23 de febrero con equipo científico de la NASA y otra carga, incluido el ADN de personas que serían enterradas simbólicamente en la Luna.
Debido a una situación de emergencia, el alunizaje de la nave espacial fue cancelado y la compañía decidió finalizar la misión con una inserción controlada de la sonda en la atmósfera terrestre.
Peregrine fue parte de los esfuerzos de la NASA para devolver a Estados Unidos a la Luna dentro del programa Artemisa.
El contrato de Astrobotic con la NASA para su desarrollo se estimó en 108 millones de dólares. Además del Peregrine, la compañía está construyendo otro módulo de aterrizaje Griffin de mayor capacidad, también en virtud de un contrato con la NASA. Se espera que sea lanzado al satélite de la Tierra a finales de este año.