La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha reivindicado este miércoles las reformas europeas realizadas por Ucrania para cumplir con los criterios fijados para su adhesión al bloque, pidiendo a los Veintisiete que estén a la altura de la determinación ucraniana cuando discutan en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno la apertura de negociaciones.
En un debate en el Parlamento Europeo sobre la cumbre europea de este jueves y viernes, Von der Leyen ha reiterado el papel que tiene que jugar Europa para apoyar a Kiev en todos los frentes mientras el Ejército ucraniano continúa en el campo de batalla, insistiendo que en el marco de la guerra contra Rusia, la entrada de Ucrania en la UE se trata de la “victoria definitiva”.
“Ucrania no sólo lucha contra el invasor, sino por Europa. Unirse a nuestra familia será la victoria definitiva de Ucrania y para ello debemos desempeñar un papel decisivo”, ha subrayado respecto a las decisión en manos de los líderes de los Veintisiete para dar luz verde a las conversaciones con Ucrania y Moldavia para ingresar en el bloque.
En este sentido, Von der Leyen ha recalcado que el fracaso de Vladimir Putin “no se traducirá automáticamente” en la victoria de Kiev y es por ello que la UE tiene que “demostrar qué significa apoyar a Ucrania el tiempo que haga falta”.
La conservadora alemana ha valorado los pasos dados por Ucrania para avanzar en las cuatro reformas – de lucha contra la corrupción, control de lobbies y respeto de las minorias – identificadas por Bruselas para dar pasos en su adhesión. “Ucrania avanza a pasos agigantados para aprobar las reformas que la llevarán a nuestra Unión”, ha recalcado.
En concreto, ha señalado que el primer examen a ley de minorías es positivo y permitirá usar más lenguas minoritarias en la escuela y el espacio público en Ucrania. Este discurso llega justo antes de la cumbre del jueves y viernes en la que los jefes de Estado y de Gobierno tendrán sobre la mesa la decisión de abrir negociaciones de adhesión con Ucrania y Moldavia y dar nuevos pasos con Georgia y Bosnia y Herzegovina.
La cita viene marcada por el bloqueo de Hungría a cualquier decisión respecto al futuro de Ucrania, incluyendo la adhesión, frente a la opinión del resto de Estados miembros del bloque que piden seguir la recomendación de la Comisión Europea y abrir negociaciones en la primavera de 2024.
Budapest lamenta “falta de preparación” de la Comisión Europea sobre el impacto del ingreso de Ucrania en la UE y alude también al estatus de las minorías nacionales en los países candidatos a entrar en el bloque.
Desde hace semanas el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, amenaza con boicotear la cumbre llamada a dar pasos en la adhesión de Ucrania, y veta también el apoyo militar y financiero a Kiev alegando que la política de la UE hacia Ucrania no está funcionando y tiene que someterse a ajustes. Además, critica una supuesta discriminación a la minoría húngara en el oeste de Ucrania.