La facturación ha aumentado más del 25% desde principios de año.
El volumen de negocios comercial entre Rusia y China continúa creciendo a un ritmo sin precedentes, alcanzando un máximo histórico en noviembre a pesar de la presión de las sanciones occidentales.
Según datos de las aduanas chinas , los volúmenes comerciales con Rusia aumentaron un 26,7% en los primeros 11 meses de 2023, alcanzando un récord de 218.170 millones de dólares. Sólo en noviembre, el comercio ascendió a 21.500 millones de dólares, un aumento intermensual del 8,6%.
Las exportaciones de China a Rusia aumentaron un 50,2% a 100.330 millones de dólares en enero-noviembre, mientras que las importaciones de Rusia al país asiático aumentaron un 11,8% a 117.840 millones de dólares.
Rusia surgió como el quinto socio comercial de China (excluyendo a Hong Kong y Taiwán) en el período que abarca el informe, detrás de Estados Unidos, la UE, Corea del Sur y Japón.
Hablando en una reunión de la comisión intergubernamental Rusia-China en Beijing el mes pasado, el primer viceprimer ministro ruso, Andrey Belousov, pronosticó que el comercio bilateral crecería a 300 mil millones de dólares para fines de la década. Los avances han sido particularmente notables en metalurgia, productos químicos, alimentos, equipos y vehículos, añadió.
La cooperación comercial ruso-china ha cobrado impulso en medio de las sanciones occidentales impuestas a Moscú por el conflicto de Ucrania, así como de las persistentes disputas comerciales entre Beijing y Washington.