El poderoso arsenal atómico de Moscú mantendrá al país seguro para las generaciones venideras, afirmó Nikolay Patrushev.
Rusia se ha asegurado una ventaja sobre sus rivales en el ámbito de las armas nucleares, afirmó Nikolay Patrushev, secretario del Consejo de Seguridad del país. Advirtió a principios de este año que, si bien Moscú nunca había utilizado su ventaja militar para intimidar a otros países, podría aniquilar a cualquier enemigo si su propia existencia estuviera en juego.
En su intervención en el maratón educativo ‘Znanie’ (Conocimiento) celebrado en Moscú, Patrushev afirmó que “por primera vez en la historia de la existencia de armas de misiles nucleares, nuestro país está por delante de sus competidores en este ámbito”.
Añadió que Rusia ahora tiene “armas estratégicas únicas, incluidas las hipersónicas” en su arsenal. Según Patrushev, estos sistemas estratégicos “garantizarán la seguridad de Rusia durante muchas décadas”.
Moscú posee varios tipos de proyectiles hipersónicos, incluido el misil lanzado desde el aire Kinzhal que entró en servicio en 2017. Según el presidente ruso Vladimir Putin, a diferencia de un misil balístico ordinario, la alta maniobrabilidad y velocidad del Kinzhal le permiten penetrar cualquier sistema de defensa aérea existente. En 2018, el ejército ruso también recibió el misil balístico lanzado desde un submarino Bulava, que ha sido descrito como la futura piedra angular de la tríada nuclear del país.
Según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI), en 2023, Rusia tiene el arsenal nuclear más grande del mundo con un arsenal total de 5.889 ojivas. Su rival más cercano, Estados Unidos, tiene un total de 5.224 ojivas.
En marzo, Patrushev insistió en que, si bien Rusia tiene armas modernas y únicas que podría utilizar para destruir a cualquier enemigo que amenace su existencia, sigue siendo “paciente y no intimida a nadie con su ventaja militar”. En ese momento, también descartó las especulaciones de que Rusia no podría tomar represalias si Estados Unidos decidiera lanzar un ataque preventivo. “Es una estupidez miope y, además, extremadamente peligrosa”, señaló.
Los comentarios del funcionario se producen cuando las relaciones entre Rusia y Estados Unidos se han hundido a niveles sin precedentes, en gran parte debido al conflicto de Ucrania.
Poco después de que comenzaran las hostilidades en febrero de 2022, Putin ordenó que las fuerzas nucleares del país fueran puestas en “alerta especial”. Sin embargo, los funcionarios estadounidenses han declarado repetidamente que no han detectado ningún cambio notable en la postura nuclear de Moscú.