La última ola de violencia de pandillas ha obligado a más de 16.000 personas a huir de un barrio de la capital haitiana, Puerto Príncipe, sumándose a las más de 130.000 personas ya desplazadas en la capital, según el Fondo de Población de las Naciones Unidas. (UNFPA) dijo el jueves.
“La última ola de violencia provocó el desplazamiento forzado de más de 16.000 personas en el distrito Carrefour-Feuilles de Puerto Príncipe, sumándose a las más de 130.000 personas que ya están desplazadas en la capital haitiana”, dijo el UNFPA en un informe de situación.
Los desplazados carecen de alimentos, atención médica, saneamiento, salud reproductiva y servicios contra la violencia de género. Las mujeres y las niñas, que son las que más sufren la violencia en Puerto Príncipe, corren el riesgo de dedicarse al trabajo sexual transaccional porque no pueden mantenerse a sí mismas y a sus familias, agrega el informe.
“El acceso humanitario para la prestación de servicios sigue siendo un desafío, principalmente en las zonas bajo control de las pandillas. Los movimientos de población continúan creando necesidades humanitarias. Hay altos riesgos de brotes epidémicos”, se lee en el informe .
Hace casi un año, el primer ministro haitiano, Ariel Henry, pidió a la comunidad internacional que creara una “fuerza armada especializada” para garantizar la estabilidad en el país, que ha estado sumido en la violencia de bandas criminales y en una profunda crisis social, humanitaria y política.
El ministro de Asuntos Exteriores de Kenia, Alfred Mutua, dijo a principios de este año que Kenia estaba dispuesta a enviar 1.000 agentes de policía para entrenar y ayudar a la policía haitiana a restablecer la vida normal en el país y proteger instalaciones estratégicas. A finales de agosto, una delegación de funcionarios encargados de hacer cumplir la ley de Kenia visitó Haití para recopilar información sobre los requisitos de la misión.