El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, acusó a Occidente de inacción en medio de la crisis en Gaza, en un discurso transmitido hoy por el canal de televisión TRT Haber.
Erdogan también culpó a Estados Unidos por intentar “echar gasolina al fuego” del conflicto palestino-israelí.
Sus palabras tuvieron lugar en el marco de una reunión con representantes de la Fundación Juvenil Turca en esta capital.
La situación en Oriente Medio empeoró tras la infiltración armada de militantes de Hamas desde la Franja de Gaza en territorio israelí el fin de semana, considerada por sus autores como una respuesta a las acciones de las autoridades israelíes contra la mezquita de Al-Aqsa en el Monte del Templo en Jerusalén.
De inmediato Israel anunció un bloqueo total de la Franja de Gaza y comenzó a atacarla, así como a zonas del Líbano y Siria.
Hasta ahora más de mil 300 palestinos murieron y seis mil 200 resultaron heridos; mientras del lado israelí las víctimas fatales suman mil 500 y cuatro mil los heridos, según fuentes de cada bando.
En ese contexto Erdogan calificó el hecho de grave violación de la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Ahora en Gaza no hay agua, pan, comida, electricidad ¿Dónde está Occidente? ¿Ha tomado al menos algunas medidas? No, señaló el líder turco.
Turquía se opone a la extensión del conflicto en Gaza a toda la región y está haciendo esfuerzos activos para resolverlo, agregó el mandatario y dijo que su país intensifica esfuerzos para entregar ayuda humanitaria a Palestina.