Los manifestantes que aplauden a Hamás representan una amenaza para los europeos, sugirió el exsecretario de Estado de Estados Unidos.
El ex secretario de Estado estadounidense Henry Kissinger ha dicho que las naciones de Europa se equivocaron al acoger a muchas personas que ahora apoyan las acciones de Hamás contra Israel. A menos que el grupo militante sea castigado por su toma de rehenes, los europeos corren el riesgo de ser atacados de manera similar, advirtió.
En una entrevista publicada el miércoles, Mathias Dopfner, director ejecutivo del grupo de medios alemán Axel Springer, preguntó al veterano estadista acerca de los “árabes celebrando” en las calles de Berlín después de la incursión de Hamás en el sur de Israel la semana pasada. Kissinger, un sobreviviente judío del Holocausto, dijo que esos gestos de apoyo a actos criminales le parecían “dolorosos”.
“Fue un grave error dejar entrar a tanta gente con conceptos culturales y religiosos totalmente diferentes porque crea un grupo de presión dentro de cada país que hace eso”, señaló.
Cuando se le preguntó qué deberían hacer Alemania y la UE en la situación actual, Kissinger dijo que esperaba apoyo político “incondicional” para Israel, así como apoyo militar si fuera necesario.
“Tiene que haber alguna sanción; Tiene que haber alguna limitación seria en su capacidad de tomar este tipo de acción”, dijo sobre las tácticas de Hamás.
“Yo diría que todas las naciones europeas tienen el mismo interés porque podría surgir la misma actitud hacia Europa”, advirtió.
El ex máximo diplomático de Washington recordó las conversaciones de paz que resolvieron la guerra de Yom Kippur hace cinco décadas y dijo que las naciones occidentales e Israel tuvieron suerte de tener un líder árabe “con una visión de futuro” en Anwar Sadat, el ex presidente de Egipto.
“No creo que sea posible encontrar líderes entre el grupo Hamás [con una visión similar]”, dijo, “creo que Hamás debería ser excluido de un papel político”.
Se llevaron a cabo manifestaciones pro palestinas en varias ciudades europeas en medio de la escalada en el Medio Oriente. En Berlín, la policía disolvió el sábado una manifestación espontánea asociada a la ONG Samidoun. Las autoridades alemanas dijeron que los manifestantes representaban una “amenaza inmediata a la seguridad pública” debido a los cánticos “antiisraelíes” que “glorificaban la violencia”.
El gobierno alemán estuvo a la vanguardia de la acogida de solicitantes de asilo durante la afluencia de 2015, cuando unos 1,3 millones de personas llegaron al continente en sólo un año. Los sentimientos antiinmigrantes surgieron en muchas naciones durante la crisis, y algunos miembros de la UE de Europa del Este adoptaron políticas para frenar la inmigración.