El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, aterrizó en Tel Aviv el jueves como parte de una gira más amplia por Oriente Medio para mostrar la solidaridad de Washington con Israel tras el ataque de los militantes palestinos de Hamas y tratar de sofocar el conflicto.
El máximo diplomático estadounidense también intentará ayudar a asegurar la liberación de los rehenes secuestrados por Hamas -algunos de los cuales son estadounidenses- y el paso seguro de los civiles de Gaza fuera del enclave densamente poblado antes de una posible invasión terrestre israelí.
Israel ha puesto el enclave, hogar de 2,3 millones de personas, bajo asedio total y hasta ahora ha matado a unas 1.200 personas en una campaña de bombardeos que ha destruido barrios enteros.
El ejército israelí dice que se está preparando para una posible operación terrestre en Gaza, pero el liderazgo político aún no ha decidido cuál. El teniente coronel Richard Hecht dijo a los periodistas el jueves que las fuerzas “se están preparando para una maniobra terrestre si se decide”.
Israel ha convocado a unos 360.000 reservistas del ejército y ha amenazado con una respuesta sin precedentes a la sangrienta y amplia incursión de Hamás durante el fin de semana. Ha estado lanzando intensos ataques aéreos contra Gaza desde el ataque de Hamás el sábado, mientras los militantes han disparado miles de cohetes contra Israel.
La agencia de las Naciones Unidas para los refugiados palestinos informó el jueves que casi 218.600 personas se encuentran refugiadas en 92 escuelas de la UNRWA en la Franja de Gaza.
Mientras continúan los ataques aéreos y los bombardeos de las fuerzas israelíes en toda la Franja de Gaza, más personas buscan refugio de emergencia.
Además, dijo la agencia, muchas otras personas están desplazadas en escuelas públicas y otros edificios. En total, al menos 340.000 palestinos han sido desplazados en todo el enclave palestino.