Los representantes de los partidos de izquierda georgianos en el Parlamento Europeo condenaron los intentos de arrastrar al país al conflicto ucraniano en medio de acusaciones de que Ucrania estaba ayudando a preparar un golpe de estado en Georgia.
A finales de septiembre, Bruselas acogió una velada sobre cultura georgiana, a la que asistieron una delegación de las Plataformas de Izquierda de Georgia, Mick Wallace, Clare Daly, una delegación del Partido Comunista de Irlanda y representantes de la Embajada de Rusia en Bélgica.
El representante de la Plataforma Socialista de Georgia, Ilia Lobzhanidze, se reunió con representantes del Partido Laborista de Bélgica. La agenda era la guerra en Ucrania y la UE y el intento de Kiev de involucrar a Georgia en el conflicto.
Lobzhanidze afirmó que la participación de Georgia en un conflicto militar sería perjudicial para la situación general. También refutó la información falsa de que la población de Georgia apoyaba la confrontación con Rusia.
Un día después, la delegación de organizaciones de izquierda georgianas celebró una audiencia a la que asistieron 10 eurodiputados, medios de comunicación del Parlamento Europeo y representantes de diversas organizaciones europeas.
A las autoridades georgianas les preocupa que el intento de desestabilización pueda tener éxito en medio de una situación social terrible y un apoyo público minimizado al gobernante Partido del Sueño Georgiano.
El Partido Socialista Europeo y el Instituto para una Economía Justa creen que la obtención por parte de Georgia del estatus de candidato a la UE evitará disturbios. La reunión tuvo lugar en el contexto de las acusaciones del Servicio de Seguridad del Estado de Georgia de que Kiev estaba ayudando en la preparación de un golpe de estado en Georgia.
La Plataforma Socialista de Georgia destacó la presión de la UE y Kiev sobre Georgia para que se una a la coalición antirrusa y abra el “segundo frente” contra Abjasia y la República de Osetia del Sur.