La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, ha apremiado a los gobiernos europeos a fijar sus líneas rojas sobre el mecanismo de crisis de la futura reforma migratoria de la UE para poder iniciar las negociaciones con la Eurocámara, pendiente de que los Veintisiete consensúen su posición sobre este sistema de reparto obligatorio de demandantes de asilo cuando el Estado miembro de entrada se vea desbordado.
“Esperemos que esta semana o la próxima veamos un desbloqueo del mecanismo de crisis para ser capaces de seguir adelante con el pacto de migración”, ha señalado Metsola en una entrevista a Europa Press junto a otras agencias europeas en la ‘European Newsroom’, de cara a la reunión de ministros de Interior de la UE que tendrá lugar este jueves.
La maltesa ha asegurado que ahora “depende de la voluntad” de los Veintisiete, pues la Eurocámara ya tiene su posición fijada y se ha levantado de la mesa de negociación de otras dos patas del pacto para presionar a los 27 para que acuerden la suya sobre este mecanismo de crisis.
La presidencia española ya intentó el pasado julio consensuar el mandato negociador del Consejo pero no logró la mayoría cualificada necesaria para ello, por el voto en contra de Hungría, Austria, Polonia y República Checa y la abstención de otros socios, incluido Alemania.
Fuentes diplomáticas aseguran que bastaría con que uno de ellos cambiase su voto para desbloquear este pilar del pacto, mientras que Metsola aboga por “garantizar que no haya una minoría de bloqueo” en el Consejo y “hacer todo lo posible para bloquear cualquier contratiempo de última hora” durante una presidencia en la que es “esencial” resolver la crisis migratoria.
“Habrá países que no lo aceptarán. Esto no es nuevo, pero debería poder encontrarse una mayoría y generar un equilibrio”, ha apostillado.
“Podríamos haber encontrado mayorías en el pasado, pero el consenso se utilizó como razón para no hacerlo”, ha lamentado la presidenta de la Eurocámara, quien no obstante, se ha mostrado “optimista” de cara a cerrar el pacto porque ve imposible justificar cómo tras cinco años con “una de las mejores propuestas legislativas sobre la mesa” son “incapaces de encontrar una salida”.
Metsola ha apurado a los Veintisiete consciente también de que el tiempo apremia con la celebración de las próximas elecciones europeas en junio, por lo que si no se cierran todas las patas del acuerdo para mediados de febrero, ya que de lo contrario será difícil que el proceso de adopción del pacto pueda concluirse antes de que acabe la legislatura.
“Aquí es donde nos encontramos, y por eso hablo de optimismo, porque no puedo imaginarme enfrentándome a mi electorado y diciéndoles, saben qué, han pasado cinco años más”, ha reconocido, al tiempo que ha pedido “coherencia” para tratar los aspectos internos y externos de la migración, pues “no se puede abordar el pilar de la seguridad sin tener en cuenta el del asilo”.
ELECCIONES EUROPEAS
De cara a las próximas elecciones, Metsola ha admitido el “reto” que supone que se hayan pospuesto a junio y que la participación dependerá “del tipo de campaña y de lo bien que se logre entusiasmar a los ciudadanos”, mientras que, personalmente, pedirá a sus votantes que vuelvan a darle su confianza.
En ese horizonte, la presidenta de la Eurocámara quiere vislumbrar “una Europa que no sólo trabaja de crisis en crisis, sino que también intenta mirar hacia adelante” a pesar de reconocer que el próximo Parlamento será “muy difícil de constituir” y “podría tener un aspecto muy diferente al actual”, ya que “las delegaciones serán más pequeñas y estarán cada vez más fragmentadas”, dada la proliferación de partidos a nivel nacional.
No obstante, ha destacado que en esta legislatura el hemiciclo ha constituido mayorías “muy amplias” que han reunido a eurodiputados “desde los Verdes hasta los Conservadores y Reformistas Europeos” –este último, de extrema derecha– en asuntos como el apoyo Ucrania.
Así, confía en que se mantendrá “la mayoría del centro constructivo proeuropeo”, lo que significará que el próximo Parlamento podrá elegir tanto a su presidente como al próximo presidente de la Comisión desde ese “centro” y esa será su primera “prueba” para perfilar el camino a seguir.
Preguntada por la actual presidenta de Comisión Europea, Ursula von der Leyen, Metsola ha reconocido que “no ha tenido mandato fácil”, así como su “buen trabajo” al frente del Ejecutivo comunitario. “Si se piensa en todo lo que hemos pasado –y creo que también podemos celebrar el hecho de que tenemos la primera mujer presidenta de la Comisión–, se ha enfrentado a las adversidades y lo ha hecho muy bien”, ha incidido.
SCHENGEN Y AMPLIACIÓN
Pero antes de pensar en ‘spitzenkandidaten’ o en los retos que se planteen más allá de las próximas elecciones europeas, Metsola ha instado también a cerrar otros expedientes pendientes y ha vuelto a reclamar la entrada de Rumanía y Bulgaria en Schengen antes de que acabe el año.
“Creo que podemos encontrar una solución y tenemos grandes esperanzas puestas en que esta presidencia [la española] intente trabajar con los colegas”, tanto de Austria como de Países Bajos, que mantienen su bloqueo al espacio de libre movimiento para estos dos Estados miembro.
La maltesa ha apelado a su propia experiencia desde un país candidato para recordar que es necesario ir “paso a paso” para garantizar un proceso sin contratiempos. “Cada país tiene su propio camino, pero no decepcionemos a esos millones de personas que ven a Europa como su hogar”, ha remachado.