Rusia dice que está observando “de cerca” la situación en Kosovo, que es “muy tensa” y “potencialmente peligrosa”.
Serbia ha recurrido a Rusia, su antiguo aliado, después de que Kosovo la acusara de orquestar un ataque en una región de mayoría étnica serbia en el norte de Kosovo el domingo.
El presidente serbio, Aleksandar Vučić, se reunió con el embajador ruso, Aleksandr Botsan-Kharchenko, el lunes para discutir las consecuencias de un enfrentamiento mortal en un monasterio ortodoxo serbio entre hombres armados de etnia serbia que irrumpieron en la aldea y la policía de Kosovo. Según las fuerzas de Kosovo, un policía y tres de los aproximadamente 30 hombres armados murieron.
Los líderes de Kosovo, que declararon el lunes día de luto , lo calificaron de ataque terrorista y culparon a Serbia de intentar desestabilizar su país.
Afrim Bunjaku fue asesinado durante un ataque contra policías de Kosovo y contra nuestro propio Estado, por un grupo de agentes altamente armados y fuertemente equipados, entrenados y planificados profesionalmente, apoyados políticamente, financiados materialmente y apoyados logísticamente por Serbia”, dijo el primer ministro de Kosovo, Albin Kurti. durante una ceremonia en honor al policía asesinado.
En respuesta, Vučić acusó a Kurti de llevar a cabo una “brutal limpieza étnica ” con el apoyo de parte de la comunidad internacional. Rusia, que no reconoce la independencia de Kosovo y tiene estrechos vínculos con Serbia, dijo que estaba observando “de cerca” la situación “potencialmente peligrosa” en Kosovo, destacando que existe una “actitud parcial hacia los serbios”.
Vučić negó que Belgrado tuviera alguna participación en el ataque, que calificó de “absolutamente reprensible”, y dijo que los pistoleros eran serbokosovares locales que “no quieren sufrir más bajo el terror de Kurti”.
Kosovo y Serbia llevan mucho tiempo enfrentados por los derechos de los serbios étnicos en el norte de Kosovo. Kosovo declaró su independencia en 2008 pero Serbia se negó a reconocerla.
La comunidad internacional se apresuró a condenar el ataque del domingo. El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, lo calificó de “inaceptable ” y pidió a Kosovo y Serbia que “eviten acciones que puedan inflamar aún más las tensiones y que regresen inmediatamente al diálogo facilitado por la UE”.
Mientras continúa la búsqueda de los pistoleros restantes, las fuerzas kosovares bloquearon la aldea de Banjska el lunes y dijeron que recuperaron el cuerpo de un cuarto atacante y un gran alijo de armas.