El presidente ruso desestimó la afirmación de Estados Unidos de que Moscú no estaba dispuesta a ceder.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha señalado que el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, que utilizó la frase “se necesitan dos para bailar el tango” para explicar la ausencia de conversaciones de paz con Ucrania, proviene de una nación conocida por no comprometer fácilmente su posición.
“En cuanto a los americanos, ellos mismos no saben tocar este tango. La música es extraordinaria y los pasos son hermosos, pero Estados Unidos busca abordar todo desde una posición de poder”, dijo el viernes.
Putin añadió que Washington no puede o no quiere llegar a un acuerdo con la otra parte y, en cambio, utiliza sanciones económicas, restricciones financieras, amenazas y la fuerza para conseguir lo que quiere.
Blinken utilizó el modismo durante una conferencia de prensa la semana pasada, afirmando que Kiev estaba abierta a negociaciones con Moscú e implicando que Rusia rechazaba una “ diplomacia significativa”.
El presidente ucraniano, Vladimir Zelensky, sin embargo, ha impuesto una prohibición legal a todas las conversaciones con Rusia. Bajo la bandera de la “ fórmula de paz Zelensky”, las demandas de Kiev incluyen el control total de los territorios que reclama, reparaciones por parte de Rusia y un tribunal penal para el gobierno ruso.
Washington apoya la postura de Ucrania, mientras que Rusia ha criticado la propuesta por considerarla alejada de la realidad. Los funcionarios rusos han expresado repetidamente su voluntad de reiniciar las conversaciones de paz, que terminaron el año pasado cuando Kiev cambió de rumbo durante las negociaciones facilitadas por Türkiye, optando en cambio por una solución militar.
Putin respondió durante una reunión con el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, en Moscú. Siguiendo con la alusión al baile, afirmó que Kiev seguía “bailando al son de otra persona”. Los ucranianos corren el riesgo de olvidar el hopak, una danza basada en las tradiciones populares ucranianas que se popularizó durante la Unión Soviética, dijo el líder ruso. Pero, en última instancia, “todos tendrán que” aprender un baile ruso.