El canciller austriaco, Karl Nehammer, calificó de “desagradable” desde el punto de vista moral comprar gas a Rusia, pero hasta ahora no hay otra manera de garantizar la seguridad del suministro energético en Austria.
“La prioridad número uno es la seguridad del suministro. Si esto se interrumpe, el sistema se verá afectado y también la producción y el suministro de energía a las personas. Por eso, en primer lugar, se trata de garantizar la seguridad del suministro de energía. No es agradable. No es agradable desde el punto de vista moral, pero es real. Y es mi obligación como canciller hacer esto”, dijo Nehammer el lunes a la emisora austriaca ORF.
El canciller también afirmó que Austria comenzó a reducir su dependencia de las importaciones de energía de Rusia ya en 2022. El país está trabajando para aumentar los suministros a través de Alemania e Italia para poder tener más proveedores, añadió.
Nehammer también dijo a la emisora que la compañía austriaca de petróleo y gas OMV tenía contratos de suministro con el gigante energético ruso Gazprom hasta 2040, y su rescisión sería demasiado costosa para Austria.
En julio, el director general de OMV, Alfred Stern, afirmó que la empresa seguirá comprando una parte importante de su gas a Rusia y no tiene previsto rescindir el contrato a largo plazo con Gazprom a pesar de haber conseguido contratos alternativos de otras fuentes para cubrir las necesidades de importación de energía de Austria.