El ministro de Unificación de Corea del Sur, Kim Yung Ho, ha contado este lunes que los servicios de Inteligencia surcoreanos creen que Rusia está ayudando a Corea del Norte a lanzar su nuevo satélite espía, tras los dos intentos frustrados de mayo y agosto.
“Es difícil predecir cuándo hará Corea del Norte su tercer intento de lanzamiento, pero parece haber señales de que el Norte recibirá asistencia técnica de Rusia”, ha dicho Kim este lunes en un encuentro con la prensa, según recoge la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
En ese sentido, el ministro ha aventurado que “existe una posibilidad muy alta” de que Pyongyang ponga en marcha una nueva serie de “provocaciones” una vez solucione los “problemas técnicos” que impidieron poner en órbita este satélite.
Kim ha explicado que está supuesta ayuda de Moscú sería la responsable de que Corea del Norte haya postergado el lanzamiento, previsto, de acuerdo con los propios anuncios de Pyongyang para octubre, para recibir mejor asesoramiento.
El pasado fin de semana, el ministro de Defensa de Corea del Sur, Shin Won Sik, no solo habló de la supuesta intervención de Rusia en dicho satélite, sino que además ya vaticinó que su vecino del norte podría lanzarlo a finales de noviembre.
A mediados del pasado mes de septiembre, el presidente ruso, Vladimir Putin, fue el anfitrión del líder norcoreano, Kim Jong Un, que no se prodiga a las visitas en el extranjero, en la ciudad de Vladivostok, para reforzar los lazos económicos y militares, mientras sortean las numerosas sanciones internacionales impuestas.