El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón se comprometió el viernes a seguir trabajando juntos para lograr la desnuclearización completa de Corea del Norte, en medio de conversaciones sobre un posible cambio en el papel y el tamaño de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos en Corea (USFK).
El comunicado enfatizó que la cooperación trilateral tiene como objetivo disuadir a Pyongyang.
Kim Myung-soo, el general Dan Caine, jefe del Estado Mayor Conjunto de EE. UU., y el general Yoshida Yoshihide, jefe del Estado Mayor Conjunto de Japón, emitieron un comunicado de prensa conjunto en la 22.ª Reunión Trilateral de Jefes de Defensa (Tri-Chod), celebrada el 11 de julio en Seúl.
Los jefes de defensa condenaron el continuo desarrollo de programas nucleares y de misiles balísticos ilegales por parte de la RPDC y acordaron continuar la coordinación para la desnuclearización completa de Corea del Norte, de conformidad con las Resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (RCSNU), se lee en el comunicado. RPDC es el acrónimo del nombre oficial de Corea del Norte, la República Popular Democrática de Corea.
Los tres líderes militares “discutieron el despliegue de las tropas de la RPDC en Rusia, así como la posible transferencia de tecnología militar de Rusia a la RPDC” y “se comprometieron a seguir trabajando juntos para responder a las amenazas de la RPDC”, al tiempo que instaron a “la RPDC a cesar de inmediato todas las actividades ilegales para desestabilizar la península de Corea, el Indopacífico y más allá”.
Después de la reunión, los tres visitaron el Comando de la Segunda Flota de la Armada de Corea del Sur en Pyeongtaek, Gyeonggi, para rendir homenaje a los 46 marineros que murieron en el hundimiento del buque de guerra Cheonan en 2010, causado por un ataque sorpresa con torpedos por parte del Norte.
La administración Trump buscó previamente una mayor “flexibilidad” estratégica al reducir los compromisos de Estados Unidos y aumentar la carga sobre sus aliados. Se esperaba que esta política se aplicara a las operaciones militares estadounidenses en el extranjero, lo que podría afectar el tamaño y la misión de las USFK. La declaración conjunta reafirma que la principal prioridad de la alianza trilateral sigue siendo contrarrestar las amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte.
Aunque China no fue mencionada explícitamente en la declaración, los líderes señalaron que la cooperación trilateral “ha desempeñado un papel clave en la promoción de la paz y la prosperidad en la península de Corea y en el Indopacífico” y que “se centraron en diversas maneras de profundizar su cooperación para garantizar la paz y la estabilidad en la región”, en una aparente referencia a la creciente presencia militar de China.
Mientras tanto, los tres países realizaron un ejercicio aéreo conjunto al sur de la isla de Jeju el viernes, que incluyó el despliegue de un bombardero estratégico estadounidense B-52H en la península de Corea por primera vez este año. También participaron los cazas KF-16 de Corea del Sur y los cazas F-2 de Japón.
El ejército coreano afirmó que el ejercicio tenía como objetivo “mejorar la capacidad de disuasión y respuesta de los tres países ante las cada vez más sofisticadas amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte”, y añadió que los aliados “continuarán el entrenamiento y la cooperación trilateral para disuadir y responder conjuntamente a las amenazas de Corea del Norte”.