Irán prohíbe a Grossi visitar instalaciones nucleares y desactiva las cámaras del OIEA tras la filtración de información confidencial a Israel.
“Ya no permitiremos a Grossi estar presente en instalaciones nucleares ni instalar cámaras, porque vimos información sobre nuestras instalaciones en documentos obtenidos del régimen israelí”, anunció el sábado el vicepresidente del parlamento iraní, Hamid Reza Haji Babaei.
Los comentarios del alto funcionario se producen tras una publicación del ministro de Asuntos Exteriores, Araghchi, en la que afirma que la “insistencia de Grossi en visitar” las instalaciones bombardeadas por Estados Unidos e Israel “con el pretexto de las salvaguardias carece de sentido y posiblemente incluso tenga intenciones malignas”.
El parlamento iraní votó esta semana a favor de suspender la colaboración con el Organismo Internacional de Energía Atómica hasta que se garantice la seguridad de las actividades nucleares del país.
Funcionarios y exfuncionarios iraníes, así como medios de comunicación, han acusado a Grossi de complicidad en la agresión que Israel lanzó el 13 de junio, un día después de que la junta de gobernadores del OIEA aprobara una resolución politizada que acusaba falsamente a Irán de incumplir sus obligaciones nucleares. Días después, Grossi admitió que no había pruebas que sugirieran que Irán estuviera construyendo un arma nuclear, la justificación que Israel y Estados Unidos han utilizado para librar sus campañas.
Esta semana, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Lavrov, afirmó que las exigencias de Grossi de supervisar el acceso al uranio iraní no incluyen ninguna garantía de que esta información no se filtre.