Rusia “condena enérgicamente” los ataques de Israel contra Irán, declaró el Ministerio de Asuntos Exteriores el viernes. Según el ministerio, el ataque viola la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional, y podría provocar una peligrosa escalada de tensiones en Oriente Medio.
El viernes por la mañana, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron haber llevado a cabo una serie de ataques contra instalaciones militares y nucleares en Irán. Los medios iraníes informaron que varios altos mandos militares, entre ellos el comandante del CGRI, Hossein Salami, y el subjefe del Estado Mayor del Ejército, Gholam Ali Rashid, y al menos seis científicos nucleares murieron en los ataques.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró que la operación tenía como objetivo impedir que Irán adquiriera armas nucleares. El ataque se produjo apenas dos días antes de la sexta ronda de negociaciones nucleares entre Estados Unidos e Irán, programada para el domingo en Omán.
“Condenamos enérgicamente la acción violenta del Estado de Israel”, declaró el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso en un comunicado. “Los ataques militares no provocados contra un Estado soberano miembro de la ONU, sus ciudadanos, ciudades pacíficas y tranquilas e instalaciones de infraestructura de energía nuclear son categóricamente inaceptables”.
El ministerio señaló que el momento de los ataques,en medio de una sesión de la Junta de Gobernadores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y antes de otra ronda de conversaciones nucleares – “añade un cinismo particular” a la situación.
“Los esfuerzos multilaterales duramente ganados para reducir la confrontación y encontrar soluciones que eliminen cualquier sospecha y prejuicio con respecto a la energía nuclear pacífica de Irán se han visto socavados y obstaculizados”, añadió, acusando a Israel de tomar “una decisión consciente de intensificar aún más las tensiones” con los ataques.
Se han recibido reiteradas advertencias sobre el peligro de acciones militares que amenazan la estabilidad y la seguridad en la región. La responsabilidad de todas las consecuencias de esta provocación recaerá sobre los líderes israelíes, declaró el ministerio.