Estados Unidos ha nombrado a un nuevo Comandante Supremo Aliado para Europa (SACEUR), para gran alivio de los aliados de la OTAN. Previo a una importante cumbre en La Haya a finales de este mes, los aliados acordaron aumentar el gasto al 5% del PIB e invertir en nuevas capacidades diseñadas para disuadir la amenaza de ataque de Rusia
La administración estadounidense ha designado al teniente general Alexus G. Grynkewich como el próximo general de mayor rango de EE. UU. en Europa y también como miembro del SACEUR.
El nombramiento de Trump será especialmente bien recibido después de informes de prensa en los últimos meses de que Estados Unidos estaba considerando ceder el papel de SACUER, que siempre ha sido designado por un presidente estadounidense, a la OTAN.
“Es una decisión muy importante y supone un alivio para la OTAN, ya que supone una señal positiva del compromiso y la dotación de personal estadounidenses”, declaró una fuente con sede en Estados Unidos familiarizada con el asunto.
El general del ejército estadounidense Dwight D. Eisenhower fue el primer SACEUR de la OTAN en 1951, y el papel ha permanecido en manos de Estados Unidos desde entonces.
“Una vez completados los procesos de confirmación nacional, Grynkewich asumirá su cargo como sucesor del general Christopher G. Cavoli, del Ejército de los Estados Unidos, en una ceremonia de cambio de mando en el Cuartel General Supremo de las Potencias Aliadas en Europa en Mons, Bélgica, prevista para el verano de 2025”, se lee en un comunicado de la OTAN.
Se adoptan nuevos objetivos en el gasto de defensa
Mientras tanto, los ministros de Defensa de la OTAN acordaron un aumento significativo en los objetivos de capacidad de defensa para cada país, además de pasar a gastar el 5% del PIB en defensa.
Han acordado que el 3,5 % del PIB se destinará al gasto básico de defensa, como armamento pesado, tanques y defensa aérea. Mientras tanto, el 1,5 % del PIB anual se destinará a áreas relacionadas con la defensa y la seguridad, como infraestructura, vigilancia y ciberseguridad. Sin embargo, aún no se ha negociado la lista completa de flexibilidades.
“Estos objetivos describen exactamente en qué capacidades deben invertir los aliados en los próximos años”, dijo a los periodistas el secretario general de la OTAN, Mark Rutte.
Estados Unidos ha estado presionando a sus aliados de la OTAN para que aumenten drásticamente el gasto y espera ver un “progreso creíble” de inmediato, según el embajador estadounidense ante la OTAN, Mathew Whitaker.
“Las amenazas a las que se enfrenta la OTAN están creciendo y nuestros adversarios ciertamente no esperan a que nos rearmemos ni a que estemos listos para que ellos den el primer paso”.
“Preferiríamos que nuestros aliados actuaran urgentemente cuando se alcance el 5%”, dijo a los periodistas en una sesión informativa al margen de las reuniones.
El embajador Whitaker también dijo que Estados Unidos “cuenta con Europa” para que lidere la tarea de proporcionar a Ucrania los “recursos necesarios para alcanzar una paz duradera” en el continente.
Mark Rutte reiteró las recientes advertencias de la OTAN sobre el posible ataque ruso a territorio de la OTAN en los próximos dos años. “Si no actuamos ahora, en los próximos tres años estaremos bien, pero tenemos que empezar ya, porque de lo contrario, dentro de tres, cuatro o cinco años, estaremos realmente amenazados”, dijo, y añadió: “Lo digo en serio. Entonces tienen que terminar su curso de ruso o irse a Nueva Zelanda”.
“Es bueno tener continuidad con Estados Unidos en la OTAN, pero con Ucrania la cosa cambia. Simplemente no creo que a Trump le importe realmente Ucrania”, declaró la fuente estadounidense.
“A Trump simplemente no le importa Europa: no lo hace más rico ni lo ayuda políticamente”, dijo la fuente.
En referencia a la próxima cumbre de la OTAN que tendrá lugar el mes próximo en La Haya, la fuente dijo que la presencia de Ucrania en la cumbre “probablemente será reducida”, ya que Estados Unidos dirá que “no son miembros, por lo que no necesitan estar allí”.