Más de la mitad de los países de la UE tienen la intención de utilizar una exención que les permita superar los límites presupuestarios para aumentar el gasto militar, según ha dicho el consejo del bloque.
La Comisión Europea propuso a principios de este año que los miembros podrían utilizar una cláusula de emergencia para gastar hasta el 1,5% de su PIB en inversiones de defensa durante los próximos cuatro años sin infringir las normas sobre déficit y deuda públicos.
La medida se produjo después de que la administración Trump sugiriera que Europa debería pagar más para defenderse, y en medio de preocupaciones de seguridad por la actual guerra de Rusia en Ucrania.
Alemania y Polonia encabezan el grupo de países que han indicado que desean hacerlo, dijo la UE en un comunicado.
Hungría y Eslovaquia, cuyos gobiernos se consideran afines a Moscú, también figuran en la lista. El resto de los Estados miembros de la UE que han decidido solicitar la activación de la llamada cláusula de escape son Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Grecia, Portugal, Eslovenia, la República Checa, Croacia y Bulgaria, según el Consejo Europeo.
“Seguimos abiertos a nuevas solicitudes de exención”, añadió el Comisario Económico de la UE, Valdis Dombrovskis.
La cláusula podría permitir gastar cientos de miles de millones de euros en rearmar el continente hasta 2030.
Aunque el gasto militar ha aumentado dentro de la UE un 31% desde 2021, muchos Estados miembros están interesados en aumentar aún más el gasto en defensa.
El nuevo canciller alemán, Friedrich Merz, ha dicho que Europa debe actuar rápidamente por el bien de su seguridad.
“En vista de las amenazas a nuestra libertad y paz en nuestro continente, la regla para nuestra defensa ahora tiene que ser ‘cueste lo que cueste’”, dijo en marzo.
Al anunciar un paquete de defensa de la UE en marzo, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, habló claramente sobre los peligros que corría Europa.
Estamos en una era de rearme. Y Europa está lista para aumentar drásticamente su gasto en defensa, afirmó.
“Tanto para responder a la urgencia a corto plazo de actuar y apoyar a Ucrania, como para abordar la necesidad a largo plazo de asumir una responsabilidad mucho mayor por nuestra propia seguridad europea”.