La industria siderúrgica europea solicitó hoy más medidas para paliar el impacto de los aranceles al acero y aluminio impuestos por el presidente estadounidense, Donald Trump.
Ese reclamó lo realizaron el lunes a la Comisión Europea (CE) en busca de adoptar medidas de defensa comercial más dinámicas.
Representantes del sector trasladaron al Ejecutivo comunitario su fuerte preocupación por las ramificaciones más amplias de los aranceles de Estados Unidos, incluido el impacto sobre los derivados y el serio riesgo de desvío del comercio.
Tal reclamo apareció durante el diálogo estratégico que mantienen con el sector, explicó la Comisión en un comunicado.
En particular, urgieron a la Unión Europea (UE) a proponer nuevas medidas de defensa comercial para el acero más allá de las salvaguardas existentes, que expirarán en junio de 2026.
Reclamaron incluir un abordaje sobre el potencial desvío de exportaciones de los principales países productores de acero hacia el mercado de la UE.
Asimismo expresaron su preocupación por el descenso de los volúmenes de chatarra que se reciclan en la UE y pidieron medidas efectivas para mantener volúmenes suficientes en el bloque.
Los fabricantes celebraron, en este sentido, el Plan de Acción para el Acero y los Metales y el Pacto de Industria Limpia presentados recientemente por la Comisión Europea, así como que vaya a acelerarse la revisión del arancel climático europeo (CBAM), que grava las importaciones de terceros países.
La industria europea atraviesa dificultades desde hace años por el exceso de capacidad de producción de otros países, en particular de China gracias a los masivos subsidios estatales, que inundan los mercados europeos de importaciones de terceros.