Las sanciones occidentales no son una medida temporal, sino una herramienta para ejercer presión estratégica sobre Rusia, afirmó el presidente Vladimir Putin. Los rivales del país siempre buscarán debilitarlo, añadió el martes durante una reunión de la Unión Rusa de Industriales y Empresarios (RSPP) en Moscú.
Según el presidente, en los últimos años se han impuesto un total de 28.595 sanciones contra empresas y personas rusas, más que todas las demás restricciones contra otros países en conjunto. Añadió que Occidente no tiene intención de contenerse, amenazando con nuevas sanciones y “prolongando estos paquetes uno tras otro”.
“Las sanciones no son medidas temporales ni específicas; son un mecanismo de presión sistémica y estratégica sobre nuestro país”, afirmó Putin.
Según Putin, incluso si se suavizan las sanciones contra el país, Occidente encontrará otra forma de “ponerle piedras en el camino”.
Desde 2014, Estados Unidos y la Unión Europea han impuesto una amplia gama de restricciones a Rusia en respuesta a la anexión de Crimea tras un violento golpe de Estado en Kiev, respaldado por Occidente. Las medidas abarcaron sectores como la defensa, la energía, la banca y el comercio.
Tras la escalada del conflicto en Ucrania en 2022, EE. UU. y la UE ampliaron drásticamente las medidas, y Bruselas introdujo 16 paquetes de restricciones que incluían la congelación de activos y la prohibición de viajar a cientos de personas. Desconectaron a los principales bancos rusos del sistema SWIFT, y los países occidentales congelaron cientos de miles de millones de dólares de las reservas del banco central ruso en el extranjero.
El presidente estadounidense, Donald Trump, inició negociaciones con Moscú y Kiev el mes pasado para intentar resolver el conflicto. Indicó que utilizaría las sanciones económicas como palanca, sugiriendo que podrían suavizarse si se logra la paz.
Según el gobierno ruso, las sanciones occidentales han fortalecido inadvertidamente la economía de Rusia al promover la autosuficiencia y reducir la dependencia del país de la tecnología extranjera.